La Comisión Permanente del Congreso de la Unión guardó un minuto de silencio por las 27 víctimas del ataque contra un bar en Coatzacoalcos, Veracruz, la noche del martes. Todos los grupos parlamentarios condenaron la masacre y se solidarizaron con familiares de las víctimas.

En tribuna, Morena exigió la dimisión del fiscal general del estado, Jorge Winckler, mientras que el PAN demandó la renuncia del titular de Seguridad Pública.

La senadora Nancy de la Sierra (PT) señaló que lo ocurrido en Coatzacoalcos es una tragedia producto de los niveles desbordados de violencia que azotan no sólo a Veracruz, sino a varios estados de la República. Son hechos lamentables y reprobables y todos debemos condenarlos.

La senadora priísta Beatriz Paredes sostuvo que el grave problema de la violencia en México sólo puede ser solucionado con un nuevo diseño en la estrategia de seguridad, donde se permita mayor participación de los gobiernos estatales y municipales.

El diputado Jaime Humberto Pérez (Morena) señaló que tras lo sucedido en Coatzacoalcos se debe investigar la actuación del fiscal de Veracruz, cuya irresponsabilidad está remarcada, y por su inoperancia e ineficacia tiene que renunciar de inmediato.

La diputada panista Sylvia Garfias destacó: Hay que dejar de echar culpas; deben asumir su responsabilidad y el PAN ya ha solicitado la renuncia del secretario de Seguridad en el estado de Veracruz. Simplemente no ha dado el ancho, reconózcanlo ya.

El vocero del PAN, Fernando Herrera, indicó que mientras el gobierno se concentra en pedir a los criminales que ya se porten bien y recurre a las madrecitas para que los regañen, la violencia escala a niveles de terrorismo.