Colectivos que fomentan la despenalización de la mariguana marcharon ayer de la Alameda al Senado de la República para exigir a las autoridades tomarlos en cuenta en los foros donde se analiza la regulación de la hierba.

Al ritmo de música electrónica, los asistentes fumaron cannabis y participaron en una asamblea de información sobre sus usos medicinales y científicos.

Queremos ser ponentes o expositores, incluso coordinar el dictamen, de ser posible, porque ya demostramos que no dominan el tema, pues todas las iniciativas tienen gravísimos errores. Son 14 iniciativas a dictaminar.

Alfonso Jesús García Pérez, coordinador de la Federación de Organizaciones Civiles Mariguana Liberación, señaló que el festival musical y la marcha se hicieron para demandar a las autoridades que se apruebe un proyecto moderado y gradual de la regulación de la mariguana, así como su uso cultural y no lúdico o embriagante; es decir, un consumo responsable.

Al igual que la activista María del Consuelo Monroy Ávila, solicitan una producción campesina de la mariguana en sociedad con el gobierno, conforme el marco legal mundial.

“El autocultivo de cannabis funciona durante las prohibiciones, pero más de 80 por ciento de los consumidores no pueden o no quieren cultivar en sus domicilios.

Una vez que sea legal la mariguana, el autoconsumo no será la principal opción, además de que el autocultivo es legal en el marco mundial, mientras la producción campesina con gobiernos no lo es. Otra petición es que hayan ingresos públicos a los sectores salud y campesino.

También consideraron la importancia de espacios libres de humo de cannabis, así como no fumadores pasivos, pues el colectivo Marihuana Liberación, agregó, no va a imponer el humo de la mota a la sociedad ni dará el mal ejemplo a los menores.

“Queremos planes de prevención, adicciones y reducción del daño, además de un protocolo científico de observación a jóvenes entre 18 y 21 años.

“Medidas adicionales para erradicar el consumo en menores de edad; es decir, la autorregulación, así como usos ecológicos de la mariguana, por ejemplo en biofibras, cañamo, reciclaje para sustituir el uso de la madera y rescatar árboles, bosques, selvas, zonas de filtración, mantos acuíferos, manantiales y al ciclo del agua. Asimismo faltan más usos médicos homeopáticos, en un protocolo general referenciado, añadieron las organizaciones.