Domingo 24 de noviembre de 2019, p. 32
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cuatro de cada cinco adolescentes en el mundo realiza menos de una hora de actividad física al día. En América Latina, las tasas de inactividad de los menores de 18 años son superiores a la media, con 84.3 por ciento. Las más afectadas son las niñas, pues 88.9 por ciento no hace suficiente ejercicio, frente a 79.9 por ciento de los varones. En el caso de México, 83.2 por ciento de los niños y adolescentes no realiza suficiente actividad física.
El organismo multinacional advierte que el estilo de vida sedentaria eleva el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas, hipertensión, diabetes, así como cáncer de colon o mama. En su estudio más reciente sobre actividad física en adolescentes, con datos de 146 países, subraya que sólo en cuatro naciones (Tonga, Samoa, Afganistán y Zambia) las niñas son más activas que los niños, por lo que lanzó un llamado de alerta.
Destacó que tener un estilo de vida activo en la adolescencia tiene beneficios permanentes, pues mejora el tono muscular y la actividad cardiorrespiratoria; contribuye a la salud de los huesos y el metabolismo ayuda a controlar el peso, además de que la práctica de alguna actividad física tiene un impacto positivo en el desarrollo cognitivo y la socialización.
No se trata, afirma, de realizar ejercicio sólo en pistas de atletismo o gimnasios, sino de impulsar actividades como trotar, caminar, andar en bicicleta o realizar alguna tarea que los mantenga activos por más de 60 minutos al día. Agrega que el país con menos adolescentes inactivos es Bangladesh, con 66.1 por ciento, mientras Corea del Sur encabeza la lista con 94.2 por ciento.
En América Latina y el Caribe, el país mejor situado es Costa Rica, con 82 por ciento de sus adolescentes inactivos, por lo que se ubica en la posición 48 a escala mundial, mientras Venezuela enfrenta los mayores desafíos con 88.8 por ciento de los menores con poca actividad física, y la posición mundial 139. Uruguay (82.2) ocupa la posición global 52, mientras México está en la posición número 61.
La OMS recomienda a los Estados miembro poner en marcha políticas y programas de eficacia constrastada; un plan de acción multisectorial que involucre a los sectores educativo, urbanístico y de seguridad vial, así como promover la importancia del ejercicio para una vida sana.