La entrega de vales de fin de año a los empleados del Gobierno de la Ciudad de México era un negociazo pero tremendo para algunos líderes del sindicato relacionados con la empresa a la que se benefició por años en la licitación de este servicio, señaló la titular del Ejecutivo local, Claudia Sheinbaum Pardo.

Por ello, agregó, se realiza una licitación abierta para elegir la mejor opción para el gobierno y los trabajadores, de allí que, subrayó, son falsas las versiones de que se pretende adjudicar el contrato de manera directa a la empresa Broxel, como se ha publicado en redes sociales. ¡No, no, Broxel no, para nada! Esa fue la que usaban en la administración pasada, recordó.

Entrevistada luego de realizar un recorrido por el plantel Coyoacán del Instituto de Estudios Superiores Rosario Castellanos, señaló que dichas aseveraciones son promovidas por los mismos dirigentes gremiales que eran parte de ese negocio –del cual no dio mayores detalles–, y por eso están protestando.

“¿Saben por qué es eso? Porque por ahí había un negociazo pero tremendo en la licitación de vales. Prácticamente siempre era la misma empresa. Ahora hay una licitación abierta y se está escogiendo la mejor opción para el gobierno y para los propios trabajadores”, expresó la mandataria.

Según los lineamientos publicados en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México del 4 de noviembre, la entrega de vales de fin de año se hará el 10 y el 11 de diciembre próximos y será por un monto de 12 mil 350 pesos para el personal de base sindicalizado, 11 mil 730 para el de las distintas corporaciones policiacas y 10 mil 170 para los trabajadores de base no sindicalizados.

Integrantes del sindicato señalaron que su principal preocupación es que el gobierno prevé entregar los vales en una tarjeta y no en papel, como en años anteriores, lo que implica un problema para ellos, ya que habitualmente reparten el dinero entre sus cónyuges, hijos y padres.

Al respecto, la mandataria capitalina señaló que se trabaja para encontrar un mecanismo que permita que los empleados repartan los recursos de esa prestación, ya sea por medio de una tarjeta o en papel, entre sus familiares.

Mayor oferta educativa

En otro asunto, Claudia Sheinbaum señaló que el Instituto de Educación Superior Rosario Castellanos tendrá el próximo año un plantel en Magdalena Contreras, que se sumará a los que ya operan en Gustavo A. Madero, Coyoacán y Azcapotzalco.

Para tal efecto, dijo, se analiza la posibilidad de integrar al instituto el inmueble que se donó a la Universidad Autónoma de la Ciudad de México en la pasada administración con el propósito de que abriera un nuevo campus, proyecto que no se ha concretado.

Al señalar que que para 2020 se destinarán 350 millones de pesos para la operación del instituto, la titular del ejecutivo local admitió que en el plantel Coyoacán aún tiene carencias, luego de que los alumnos le pidieron conectividad a Internet, una biblioteca, una sala de cómputo y clases de inglés, por lo que se buscará cumplir esas demandas el próximo año.