Es una campaña de difamación, dice el mandatario
El rotativo publicó que el gobernador usó su poder
para la compra irregular de una casa y un terreno
Jueves 26 de septiembre de 2019, p. 17
Ciudad Juárez, Chih., El gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, amenazó a El Diario, que se edita en esta localidad, por publicar documentos según los cuales el panista habría adquirido de manera irregular una vivienda y un terreno.
En un editorial titulado Su piel sensible sólo admite aplausos y miel
, El Diario afirma que el mandatario se refiere al título de ayer publicado en páginas interiores sobre la segunda parte del reportaje relacionado con el terreno invadido por el gobernador
.
La noche del martes, en cadena de televisión, radio e Internet, el gobernador anunció “que presentará una demanda civil en la corte de Texas, en El Paso, en contra de Osvaldo Rodríguez Borunda, dueño de El Diario de Juárez y El Diario de Chihuahua, por la campaña de difamación en su contra iniciada hace tres años”. Rodríguez Borunda reside en esa ciudad desde hace al menos tres décadas.
Durante la emisión, Corral Jurado “presentó el contrato de promesa de venta con el propietario de un terreno adjunto a su domicilio particular, ubicado en Ignacio de la Peña y Costa Rica, en Ciudad Juárez. Según El Diario, el gobernador invadió y despojó ese terreno a su propietario, según publicó entre lunes y martes”.
El contrato de promesa de compraventa se celebró el 29 de octubre de 2018 con los dueños, Ricardo Álvarez Chabre y Cecilia Trejo Parra, pero en el Registro Público de la Propiedad el predio aparece con tres embargos, el primero en 1992.
Yolanda Miranda, dueña del inmueble que adquirió Corral Jurado, aseguró que su madre (hoy una anciana de 91 años) fue engañada por el gobernador para comprarle una casa a muy bajo costo, la cual no ha pagado. Corral, sostuvo, no la ha recibido para aclarar que su progenitora, quien está enferma, no estaba capacitada para vender.
El rotativo agrega que el costo del terreno efectivamente debe ser muy bajo. El problema radica en la forma que el gobernador usó, evidentemente, su poder y su investidura para hacerse de él
.
Lo acusa de haberse conducido “de manera ilegal, en un franco exceso de abuso de poder y ataque flagrante al ejercicio periodístico y de libertad de expresión, ya que Corral Jurado ha utilizado espacios de radio y televisión pagados por el gobierno estatal para atacar a El Diario y defenderse de un asunto estrictamente personal, como es esa operación inmobiliaria. Insiste también en sabotear a esta empresa.
“Cual dictador moderno, advierte que actuará contra El Diario por ésa y otras publicaciones como si el régimen que encabeza no fuera motivo de auscultación periodística alguna, como si la obligación fuera la de adularlo y tapar toda su ineptitud, ligerezas y francas frivolidades, como la de jugar golf toda una mañana de viernes en horario hábil. Eso lo mantiene innegablemente fúrico”.
“Lo responsabilizamos, por lo tanto, de cualquier agresión más allá de las palabras a quienes laboramos en el corporativo de El Diario en cualquiera de sus niveles y en cualquier parte del estado o fuera de él.”