La artista indaga el papel del individuo inmerso en la sociedad
Jueves 26 de septiembre de 2019, p. 5
La ira, la vanidad, las buenas relaciones, los cinco sentidos y el apego a lo físico articulan El juego, coreografía de Isabel Beteta que hoy estrena la compañía Nemian Danza Escénica en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.
Esa obra –que junto con Kafkiana e Historia de historias integra el programa Historia– traza un camino de la vida del individuo.
Beteta, directora de la agrupación que celebra 25 años, con El juego intenta comprender la relación del yo individual con el exterior. ‘‘Es importante encontrar algo desde el individuo y desde cómo somos y hablar de nuestra tarea particular como parte de una sociedad. En la medida que estés consciente de tus fortalezas y debilidades, de cómo eres y quién eres, puedes a pesar de esas flaquezas aportar algo’’.
En esa coreografía los bailarines revelan significados complejos y dan forma a patrones habituales en lo cotidiano para reflejar el autoconocimiento de cada intérprete.
Transición en la compañía
‘‘No podría decir que la existencia es un juego en el que te posicionas y resuelves situaciones que se te presentan y vas descubriendo de ti. Es un despertar duro y estas historias reflejan el transitar por la vida”, explica Beteta en entrevista con La Jornada.
La coreógrafa gusta de que sus obras tengan un fondo, un sentido en la forma, pues no puede crear piezas abstractas. ‘‘Las obras deben estar relacionadas con el país y el comportamiento humano y El juego llega en buen momento.
‘‘La pieza está inspirada en El juego de Lila, en el autoconocimiento y hubo algo que me fue llevando. Generalmente trabajo con una imagen base, la cual representa lo que quiero decir en la obra. Además, en una época en la que todo mundo está metido en ‘yo soy’, ‘yo quiero’, ‘yo necesito’, un egocentrismo sin pies ni cabeza, he tratado de no ser descriptiva ni tan abstracta, que nadie conozca de lo que hablo.
‘‘Espero que El juego genere una integración mayor del grupo, pues existe la tendencia de que los dos chicos nuevos en Nemian suelen mantenerse alejados porque no son parte de un proceso de 25 años.”
Para el estreno de El juego, los bailarines Javier Amado, Elena Hernández, Eustorgio Guzmán, Erick Miranda, Rosario Verea y la propia Isabel Beteta, practicaron El juego de Lila, diseñado para comprender la relación del yo individual con el ser absoluto, y así adentrarse en esa coreografía.
‘‘Del juego original partieron muchas ideas, emociones, sensaciones que nos llevaron a sacar lo más apegado de lo que se plantea. Estamos descubriendo muchas sensaciones y creo que el movimiento se va dando de manera paulatina. Es un proceso diferente a lo que hemos trabajado en la compañía”, sostiene Javier Amado.
A diferencia del bailarín, Rosario Verea asegura que El juego marca un momento de transición en la compañía y su planteamiento se relaciona con la visión de Nemian.
El programa Historia, que se completa con Kafkiana, de Verea, e Historia de historias, de Beteta, se presenta hoy a las 20:30 horas en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (Donceles 36, Centro Histórico).