En el proyecto de presupuesto para 2020 prácticamente desaparece el rubro de comercialización de granos y oleaginosas.

Todavía en este año, el programa de apoyos a la comercialización contó con 6 mil 707.7 millones de pesos. Para 2020, el gobierno federal propone asignarle tan sólo 129. 2 millones de pesos, lo que implica un desplome de 98.07 por ciento, advirtió el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).

De 13 programas para el campo contemplados en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 (PEF 2020) y que es ejercido por diferentes secretarías, el referido a la comercialización fue el tercero con el mayor recorte.

Sólo fue superado por los programas de mejoramiento de condiciones laborales en el medio rural y el de apoyo para la adquisición de leche que no contarán con un sólo peso en 2020, porque el PEF plantea un recorte de 100 por ciento a los 35 millones y mil 768 millones de pesos que, respectivamente, se les asignaron en 2019.

En 2015, el rubro de comercialización concentraba 13 por ciento del presupuesto total de la Secretaría de Agricultura, en este año representó 10 por ciento y para el próximo año las autoridades proponen asignarle únicamente 0.3 por ciento de los recursos de la dependencia.

La Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (Aserca) llegó a contar con un presupuesto de 9 mil millones de pesos hace un quinquenio, con los que garantizaba la comercialización de 50 por ciento de la producción de granos y oleaginosas a precios estables, lo que quedará en riesgo si el Congreso de la Unión aprueba el presupuesto planteado por el Ejecutivo federal.

Con la asignación presupuestaria planteada no se podrá hacer frente al ingreso objetivo del ciclo otoño-invierno 2018-2019 y primavera-verano 2019, dejando a más de 128 mil productores sin una red de seguridad al ingreso, aseveró GCMA. El ingreso objetivo se refiere al precio mínimo por tonelada comercializada y opera cuando el precio de mercado se ubica por debajo del establecido y la secretaría paga la diferencia con un apoyo directo al productor.

Agregó que también habrá consecuencias en los créditos que solicitan los campesinos, toda vez que la comercialización funcionaba como garantía de los mismos.

Autosuficiencia lejana

La consultoría consideró que la autosuficiencia en granos y oleaginosas no puede alcanzarse solamente con transferencia monetarias a los productores de autoconsumo, porque se requiere seguir impulsando al agricultor comercial y también complementarlas con asistencia técnica y minimizar los costos de producción.

El aumento en las transferencias directas a salud, educación, infraestructura e incluso a productores agrícolas, advirtió, disminuye los subsidios a la inversión y productividad, derechos a la alimentación, comercialización, sustentabilidad y financiamiento.