La FGR informó que fueron capturados en la CDMX
Jueves 22 de agosto de 2019, p. 13
La Fiscalía General de la República (FGR) detuvo a seis agentes en activo de la Policía Federal (PF) involucrados en la ejecución de 16 personas que formaban parte del grupo que en enero de 2015 tenía ocupado el palacio municipal de Apatzingán, Michoacán.
La institución que dirige Alejandro Gertz Manero informó anoche que personal de la Policía Federal Ministerial (PFM) cumplimentó seis órdenes de aprehensión giradas por el juez octavo de Distrito de Procesos Penales Federales en Michoacán, con sede en Uruapan, por la probable comisión de los delitos de homicidio y, en cuatro de dichos mandamientos, también por homicidio en grado de tentativa.
Se trata de seis integrantes de la PF, institución que en todo momento colaboró y facilitó al Ministerio Público Federal las condiciones para que dichos elementos fueran aprehendidos en sus propias instalaciones
, indicó la FGR.
En una primera acción, los efectivos ministeriales aprehendieron en la alcaldía Coyoacán a Israel S
y Antonio S
; de manera simultánea, personal de la PFM cumplimentó órdenes judiciales en contra de Heriberto C
y Jorge “C en la alcaldía Miguel Hidalgo; posteriormente, fueron capturados Rodrigo G
y Juan G
en Azcapotzalco.
De acuerdo con los antecedentes de este caso, los civiles que formaban parte de la fuerza rural ocuparon la alcaldía el 22 de diciembre para exigir el retiro de las fuerzas federales y ser reconocidos como autodefensas de Apatzingán.
La madrugada del 6 de enero de 2015 arribaron los agentes federales, supuestamente para desalojar y desarmar a los manifestantes.
Uno de los testimonios recogidos por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), como parte de la recomendación 3VG /2015, señala en su página 24: “Todos los compañeros trataban de dialogar con los policías federales para que soltaran a sus compañeros, que no estaban armados, únicamente traían palos. Que los federales comenzaron a disparar contra la gente. Que los fallecidos gritaban que no les dispararan por que venían desarmados, pero el gobierno respondió ‘mátenlos a todos a los hijos de (…)’. Que también los federales decían: ‘Que no quede ninguno vivo(…)’. Después los revisaban a los heridos y les daban el tiro de gracia”.