Que México sea México, pero mejor
Nuevo orden regional energético: Lejano Oriente ruso y Asia Central
Votos y devotos intercambiables
a derecha al ataque (1): El gobierno de Venezuela acaba de devaluar su moneda ante la disminución de sus ingresos petroleros. El Universal informa que para las importaciones prioritarias la tasa de cambio será de 2.6 bolívares por dólar pero para todas las demás operaciones pasará a 4.3. La mayoría de la clase media, grita como loca (ya era opositora antes de la medida). Otros diarios son ferozmente agresivos. Últimas Noticias publica destacadas y en primera página declaraciones del líder del partido Primero Justicia: éste es un gobierno chorro y pirata que se dedica a saquear las arcas públicas para enriquecer a la boliburguesía
. En ese tono a pesar de que la derecha se queja de que no hay libertad de prensa. El Nacional reproduce declaraciones de monseñor Lückert, vicepresidente del Consejo Episcopal, quien deplora el impacto inflacionario
que tendrá la medida, y agrega: Hugo Chávez no puede seguir mintiéndole al país
. Y va una.
Cabello para obras
Descuento y regalo
Fabián Barba, congruencia torera
a decisión, anunciada el pasado viernes por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de devaluar la moneda de su país, el bolívar, y establecer un tipo de cambio dual –uno para sectores prioritarios como la salud y la alimentación, de 2.6 bolívares por dólar, y otro de 4.3 bolívares por dólar para rubros como el automotriz, el comercio y las telecomunicaciones–, ha sido recibida de manera contrastada por los distintos sectores de opinión pública de aquel país.
Demandan protección para activista
or qué tanta saña, odio, rencor, en el mensaje devastador: Feliz Navidad, porque esta va a ser tu última Navidad
? Ante esto, ¿cómo deben estar Adolfo Guzmán Ordaz, defensor de los derechos humanos chiapaneco, y su familia, en vías de que se inocule el síndrome postraumático? Hacemos una petición al gobernador de Chiapas para que se estructuren medidas cautelares para él y su familia con carácter de acción urgente en derechos humanos. Exhortamos a todas las ONG del país para hacer un seguimiento de este caso abominable.
a crisis mundial –que continuará algunos años más– golpeará con fuerza particular a los países caribeños. Las pocas materias primas que exportan rendirán menos divisas mientras que la factura por el combustible que casi todos importan seguirá siendo la misma. Los ingresos provenientes del turismo, en todos ellos, y los que se obtienen, en el caso cubano, con la ayuda técnica (médica y en la enseñanza), tenderán a estancarse o a disminuir. Al mismo tiempo, el cambio climático aumentará la fuerza devastadora de los huracanes y provocará sequías e inundaciones que tendrán efectos particularmente duros para los frágiles suelos tropicales y dificultarán el autoabstecimiento alimentario. Para algunos países, como República Dominicana o Haití, incluso la desgarradora solución
de la emigración será más difícil ante la crisis de los países que hasta ahora acogían como mano de obra barata, empleadas domésticas o prostitutas a los menos pobres de esas regiones caribeñas, que por lo menos podían pagarse la emigración. Para otros, como Cuba, las nuevas facilidades para las visitas de familiares residentes en Estados Unidos, que llegan cargados de regalos, aumentarán las diferencias sociales internas en la isla, constituirán una poderosa herramienta para la presión política, moral, cultural estadunidense en favor de un consumismo que la relativa igualdad y la austeridad del régimen cubano obstaculizan y serán un disolvente de los elementos –como la solidaridad, la defensa intransigente de la independencia, el orgullo nacional– que desde la Revolución dan la base para el consenso mayoritario que aún tiene el gobierno. Porque, aunque casi todos los cubanos, cotidianamente, viven protestando contra las enormes dificultades materiales y las trabas burocráticas que les afligen y no esperan ninguna solución mágica de parte de los responsables de tantos errores pasados, la inmensa mayoría de ellos rechaza resueltamente la transformación de Cuba en otro Haití u otro Puerto Rico, a la rastra del imperialismo en descomposición.
a Secretaría de Energía (Sener) lleva a cabo regularmente publicaciones, ahora lo hizo incluyendo la Prospectiva del mercado de gas natural 2009-2024
. Nos vamos a ocupar de las importaciones de este energético.
ometido a la dictadura del mito fiscal, el tristemente célebre hueco
que el ahora gobernador del Banco de México dejó en la Secretaría de Hacienda como pliego de mortaja, el gobierno no pudo sino acogerse a la sabiduría convencional y sus ramplonas metáforas contra factuales. En su comparecencia ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el flamante secretario de Hacienda se las arregló para no responder a las preguntas de los legisladores y se refugió en apelaciones reiteradas a la responsabilidad gubernamental para evitar males mayores.
n estos días se ha puesto de moda el viejo problema de la cada vez más intensa participación de la Iglesia católica en la vida política. No le perdonan al PRD ni, por tanto, a la Asamblea del Distrito Federal ni al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, que se haya aprobado la ley que regula la relación entre personas del mismo sexo.
l fin de año, como parte de mi investigación, tuve nuevamente la oportunidad de pasar unas semanas en Estados Unidos entrevistando a trabajadores migrantes mexicanos que se encuentran en algunas comunidades de la costa este de Estados Unidos. Uno de mis objetivos era conocer cómo estaban enfrentando la crisis y si había alguna disparidad con la situación vivida a finales de 2008.
a estrategia geopolítica de Estados Unidos después de 1945 se basaba en lo que parecía rocas sólidas: controlar a sus dos enemigos derrotados en la Segunda Guerra Mundial, Alemania y Japón. Por largo tiempo, cada país estuvo gobernado por un solo partido conservador —la Unión Demócrata Cristiana (CDU), en Alemania, y el Partido Liberal Demócrata (LDP), en Japón. Ambos partidos impulsaron una política de alianza cercana con Estados Unidos, y de respaldo fiel a sus posiciones geopolíticas.
la llegada de los españoles a la cuenca de México, en 1519, gobernaba el poderoso tlatoani Moctezuma, de quien escribió Hernán Cortés. Era tan temido de todos, así presentes como ausentes, que nunca príncipe del mundo lo fue más
. Tras describirle al rey Carlos V, Tenochtitlán y su gemela Tlatelolco, que los habían deslumbrado con sus majestuosas construcciones, rodeadas de cinco lagos, cruzadas de canales por los que surcaban miles de canoas con mercancías nunca antes vistas, le habló del palacio del tlatoani: Tenía dentro de la ciudad sus casas de aposentamientos, tales y tan maravillosas que me parecería casi imposible poder decir la bondad y grandeza de ellas, y por tanto no me pondré en expresar cosa de ellas más que en España no hay su semejable
.
ayó en mis manos El libro de los elogios, de Alberto Manguel, con prólogo de Enrique Vila-Matas. Lo leí encantada, como he leído, y hasta comentado, otros libros del mismo autor, incluidos, por supuesto, la Guía de los lugares imaginarios y La historia de la lectura. Salvo por una novela suya que no me atrajo (y que por cierto encontré y hojeé en la primavera de 2008 en una librería de Amberes, Bélgica, uno del puñado de libros en español en esa tienda), he leído todos los títulos de Manguel, siempre con gusto y admiración. Pero debo confesar que ahora dudé si comentar o no el de los Elogios; me pareció que ameritaban más mi atención ciertas reflexiones alrededor de Manguel, y quizá del tema del elogio.
logio de la diferencia. Un niño con una fisionomía fantástica, objeto primero de azoro y temor, luego de curiosidad inquieta para la madre que advierte que su frágil espalda está cubierta de moretones y raspones inexplicables, y sus frágiles omóplatos transformados en un par de alas. En lugar de gatear, el bebé gallináceo comienza a volar y sus alas se cubren de plumas grisáceas; en el aprendizaje de sus primeras maniobras choca contra las paredes, se lastima; es preciso protegerlo en su cuna, cerrar su cuarto, alejarlo del escarnio público, aceptarlo como un ser marginal y extraño, extravagancia de la naturaleza, figura vagamente espectral en un hogar proletario en las afueras de París.