De nuevo los niños duermen sin sueños
envueltos en los harapos de su silencio.
Y esta canción amarga que mana desde los tiempos de la abuela
no es arrullo para el sueño.
Inundó profundamente la noche.
Inundó profundamente en el invierno infantil
que cubre helada la nieve de la guerra
y la muerte una mariposa negra en su voz–
No es arrullo para el sueño.
“En la colina de los pájaros
En la colina del fuego
En la colina del norte
No durmáis.
Cuidad vuestra puerta cuidad vuestro dolor
Cuidad vuestro sueño que no vuelva a pasar.
Puede volverse una pequeña pequeña hada
Puede también seguir como un delfín vuestra noche
Puede trinar en vuestras ramas como un ruiseñor
Puede disolverse como un perro fiel a vuestros pies
Cuidad vuestro sueño cuidad vuestro sueño
Que no os engañen las sombras del viento.” Arrullo como el río profundo del silencio
donde fluye amable en el invierno infantil
El mágico río del silencio
que inunda la ladera alrededor de la colina.
Y sopla el viento del norte
La colina resiste
Muerte es el Viento del Norte
Y la colina Rostro del amor.
La colina de que mana el profundo río del silencio
es de los muertos que inundan nuestra vida.
Mañana mañana mañana
De nuevo a la colina subirán los niños
otra vez a jugar su nueva esperanza. |