Integrantes de la organización de Inquilinos Guerrero Buenavista interpusieron un recurso de amparo indirecto para recuperar el predio de Guerrero 81-85, que fue comprado por un particular de “manera fraudulenta, pues tres de los cinco vendedores ya habían fallecido al momento de ratificar el contrato, y posteriormente éste se lo vendió a Banca Mifel”.
Carlos Pérez Ibarra, uno de los afectados, señaló que el recurso se interpuso en el juzgado décimo de distrito en materia civil, pues se trata de un predio que “54 familias compramos y para lo cual se firmó un contrato de compraventa privado el 22 de marzo de 2002”.
Dicho contrato se entregó al Instituto de Vivienda para que las familias accediéramos a un crédito para su demolición y la posterior construcción de igual número de viviendas de interés social, lo cual no ha sucedido, explicó.
El 12 de febrero de 2019, sin embargo, denunció, se concreta su compraventa ante el notario 105, Conrado Zuckerman, a favor de un particular, “cuando tres de los vendedores habían muerto años atrás y éste firma otro contrato de compraventa con Banca Mifel”.
Señaló que dicha transacción es “fraudulenta porque el Invi cuenta con los documentos que acreditan que somos los dueños del predio y que al igual que otro que tenemos en la calle Violeta 71, se fusionaron con tres predios más”.
Con base en “esa supuesta compraventa, en octubre pasado, medio centenar de policías trataron de desalojarnos de nuestra propiedad, lo cual logramos frenar, por lo que exigimos al Invi que actúe y nos devuelva nuestro predio, porque no vamos a permitir que quede en manos de particulares, porque esta dependencia no interviene”.