Nueva York. Amazon y el grupo naciente que organizó con éxito el primer sindicato estadunidense de la compañía se encaminan a una revancha el lunes, cuando una junta laboral federal cuente los votos emitidos por los trabajadores de almacén en otro local de Staten Island.
Una segunda victoria laboral podría dar a los trabajadores en otras instalaciones de Amazon —y en otras empresas— la motivación que necesitan para emprender esfuerzos similares. También podría cimentar el poder y la influencia del Amazon Labor Union (ALU, por las siglas en inglés del Sindicato de Trabajadores de Amazon), el grupo que aseguró la histórica victoria del mes pasado.
Pero una derrota podría silenciar parte de la celebración laboral y generar dudas sobre si la primera victoria fue solo una casualidad.
Se espera que los resultados de las elecciones sean anunciados el lunes por la noche por la Junta Nacional de Relaciones Laborales, que supervisa el proceso. Mientras tanto, la agencia aún debe decidir si certifica la primera victoria, que ha sido disputada por Amazon.
Hay muchos menos trabajadores elegibles para votar en esta última elección en comparación con el mes pasado: unos mil 500 en comparación con 8 mil 300 en la instalación vecina de Staten Island. También hay menos organizadores: alrededor de 10 contra unos 30.
“Aquí es una lucha mucho más personal y agresiva”, dijo Connor Spence, un empleado de Amazon que trabaja como vicepresidente de membresía del sindicato.
Mientras tanto, Amazon sigue realizando reuniones obligatorias para persuadir a sus trabajadores de rechazar el esfuerzo sindical, publicando volantes antisindicales y lanzando un sitio web instando a votar por el “NO”.
La portavoz de Amazon, Kelly Nantel, dijo en un comunicado que depende de los empleados si quieren o no unirse a un sindicato. Pero “como empresa, no creemos que los sindicatos sean la mejor respuesta para nuestros empleados”, dijo Nantel. “Nuestro enfoque sigue siendo trabajar directamente con nuestro equipo para continuar haciendo de Amazon un excelente lugar para trabajar”.
A pesar de ser nuevo y tener pocos integrantes, ALU ha obtenido el apoyo de los destacados líderes sindicales y legisladores. En un mitin la semana pasada, los legisladores Bernie Sanders y Alexandria Ocasio-Cortez hablaron en apoyo de los organizadores.