La directora Heidi Ewing hace un poderoso debut narrativo con I Carry You with Me (Te llevo conmigo), una historia onírica y tierna que abarca décadas acerca del amor, el sacrificio, la memoria y la migración.
El personaje principal es Iván (interpretado por el actor mexicano Armando Espitia), un aspirante a chef que conocemos en México mientras lucha por conseguir un lugar en la cocina y ganar suficiente dinero para mantener a su hijo. Su jefe, que lo tiene lavando platos y destapando inodoros, le dice que sea paciente. El título de escuela culinaria de Iván y su talento no le interesan al jefe, quien le da a un familiar necesitado el puesto cuando se abre una plaza en la cocina.
Una noche Iván conoce al guapo Gerardo (a quien da vida el actor mexicano Christian Vázquez), un profesor que, a diferencia de él, vive abiertamente como gay. Así comienzan un apasionado romance que Iván trata de mantener en secreto. Su miedo es que la madre de su hijo no lo deje verlo si sale del clóset y que su propia madre no pueda comprenderlo. Cuando parece que será expuesto, toma la decisión de emigrar a Estados Unidos con su mejor amiga, Sandra (interpretada por la actriz cómica mexicana Michelle Rodríguez en un papel desgarradoramente bueno), y dejar todo atrás con la esperanza de tener mejores oportunidades. La forma en que los personajes que viven en México hablan de aquellos que han hecho el cruce al otro lado suena como si desaparecieran para siempre.
Nueva York al principio dista de ser una tierra prometida para Iván, quien sigue sin tener un lugar en la cocina y termina trabajando como conserje y repartidor. También está dolorosamente solo y aislado, con sólo Gerardo como salvavidas.
La película va y viene entre el pasado y el presente y muestra algunos flashbacks devastadores de las infancias de Iván y Gerardo y sus tensas relaciones con sus propios padres.
Por la estructura del filme, pronto sabemos que Iván logra su sueño y tiene éxito como chef en Nueva York. Pero también queda muy claro que las promesas de volver con su hijo no se han cumplido. Hay demasiadas complicaciones por el hecho de ser indocumentado y la amenaza de la deportación siempre lo abruma. Duele saber por medio de una de sus conversaciones por FaceTime que el niño que dejó en México ya es un hombre.
Ewing, quien ha codirigido antes documentales, escribió el guion con Alan Page Arriaga basados en la historia de un aclamado chef de Nueva York. El proyecto comenzó como un documental antes de evolucionar hacia una especie de híbrido, con actores interpretando las versiones jóvenes de Iván y Gerardo. La forma en que se unen los elementos no lineales a veces afecta el flujo general y la conmoción de algunos momentos clave, pero la película siempre es entretenida y emocionalmente auténtica.
El director de fotografía mexicano Juan Pablo Ramírez hace maravillas con la cámara, capturando las energías tan diferentes de México y Nueva York. México existe principalmente como una idea nostálgica de Iván y se le da una cualidad como de ensueño.
I Carry You with Me no podría ser más específica sobre las dificultades de una pareja gay indocumentada que trata de abrirse paso en el mundo, pero esa especificidad hace que sus temas y emociones sean totalmente universales. Para el final, las derrotas de Iván, sus triunfos y sus recuerdos buenos y malos comienzan a sentirse propios.
I Carry You with Me, un estreno de Sony Pictures Classics, tiene una clasificación R (que requiere que los menores de 17 años la vean acompañados de un padre o tutor) de la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos (MPAA, según sus siglas en inglés) por diálogos y escenas breves de desnudos. Duración: 111 minutos.