Estudiantes de la UNAM exigen su supresión por amenazar la integridad

Sábado 12 de abril de 2025, p. 11
La pronta derogación del artículo 15 del reglamento del Tribunal Universitario, el pasado 9 de abril, que establecía la suspensión o expulsión inmediata de alumnos de la UNAM que incurrieran en actos vandálicos, no es otra cosa que un intento de apaciguar a la organización estudiantil que se ha estado manifestando y que resulta muy peligrosa para ciertos grupos al interior de la universidad
, reprocharon estudiantes de diversas facultades y escuelas.
En conferencia frente a la Biblioteca Central, exigieron al Consejo Universitario la supresión
del citado tribunal, ya que no es una institución que imparta justicia, sino un mecanismo punitivo que amenaza la integridad del estudiantado
.
Asimismo, demandaron la derogación inmediata
de reformas realizadas a los artículos 93-100 del Estatuto General de la UNAM, que colocan la suspensión y expulsión de los alumnos que cometen faltas contra la legislación universitaria bajo criterio y dispuestos a la subjetividad de las autoridades
.
Antes del inicio del periodo vacacional de Semana Santa, la asamblea interuniversitaria reiteró su demanda de comedores subsidiados, que la UNAM se pronuncie en favor de las familias de personas desaparecidas y contra la violencia de género. Igualmente, los estudiantes pidieron la reinstalación de alumnos expulsados.
Existe la pretensión de intensificar la persecución a estudiantes organizados por las más diversas causas mediante el fortalecimiento de las facultades
del Tribunal Universitario, afirmaron.
Vandalizan tiendas de conveniencia
Luego de vehementes declaraciones de estudiantes de las facultades de Arte y Diseño, Filosofía y Letras, entre otras, un grupo de personas con el rostro cubierto y vestidos de negro, junto con otros jóvenes, bloquearon avenida Insurgentes y Eje 10, e hicieron pintas en mobiliario universitario.
Además, saquearon un par de tiendas de conveniencia y una farmacia, ayudándose de los mazos que portaban, y lanzaron algunos productos hacia los jóvenes que los veían afuera, sin que autoridades intervinieran.
Después, regresaron a Ciudad Universitaria y se dispersaron en las inmediaciones de la Facultad de Filosofía y Letras.