En curso, 31 mil denuncias por daños causados por el herbicida
Miércoles 22 de junio de 2022, p. 26
Washington. La Suprema Corte de Estados Unidos rechazó ayer atender un recurso del grupo alemán Bayer, propietario de Monsanto, con el que pretendía impugnar miles de denuncias que afirman que su herbicida Roundup causa cáncer, abriendo la puerta a indemnizaciones millonarias.
Al decidir no intervenir, el alto tribunal ratifica una sentencia judicial anterior que condena al grupo a pagar 25 millones de dólares a un jubilado, Edwin Hardeman, quien atribuye el cáncer que padece a este herbicida producido con glifosato.
Conforme a la práctica habitual, la Suprema Corte no justificó su decisión, que puede tener graves consecuencias para Bayer, objeto de más de 31 mil denuncias similares, además de aquellas en las que llegó a un acuerdo. Y la cifra podría aumentar.
La empresa alemana ya destinó 6 mil 500 millones de dólares para hacer frente a nuevos procedimientos (2 mil millones inicialmente y luego 4 mil 500 millones adicionales tras el rechazo de un acuerdo).
La decisión del tribunal supremo abre un camino claro
para las víctimas del cáncer ante los tribunales, dijo el abogado Matt Stubbs.
Su bufete representa a miles de demandantes relacionados con Roundup y una oleada de casos
irán a juicio en los próximos meses
, afirmó.
La acción de Bayer perdió 2.05 por ciento en la Bolsa de Fráncfort.
Bayer discrepa respetuosamente con la decisión de la Suprema Corte
, pero está completamente preparado para afrontar el riesgo legal asociado con posibles futuras denuncias en Estados Unidos
, reaccionó el grupo en un comunicado.
La compañía dice no admitir ningún fallo ni responsabilidad
y sigue apoyando sus productos Roundup, una herramienta valiosa para una producción agrícola eficaz en el mundo
.
Edwin Hardeman, diagnosticado con un linfoma no Hodgkins en 2015, fue uno de los primeros en demandar a Monsanto, afirmando que su enfermedad se debió al herbicida que usó en su propiedad durante 25 años. Acusaba al grupo de engañar a los usuarios asegurando que el glifosato era inofensivo y de no incluir advertencias en sus etiquetas. Presentó una demanda civil en 2016.
En 2019 Bayer fue condenado a pagarle 25 millones de dólares por daños y perjuicios, decisión confirmada en apelación en 2021.
La empresa recurrió entonces a la Suprema Corte de Estados Unidos, ante la cual impugnó la sentencia alegando que la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) estima que el uso de Roundup no merece una advertencia especial contra el cáncer.
La semana pasada una corte de apelaciones con sede en California ordenó a la EPA que lo reconsidere.
El principal principio activo de Roundup es el glifosato, clasificado como probable cancerígeno
por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer de la Organización Mundial de la Salud.
Monsanto insiste en que ningún estudio ha concluido que Roundup, que se vende desde la década de 1970, y el glifosato, sean peligrosos.
Bayer compró a la estadunidense Monsanto en 2018 por 63 mil millones de dólares. Desde entonces, se ha visto envuelta en múltiples juicios relacionados con herbicidas.