Santiago Mazari Hernández El Carrete fue sentenciado a 20 años de prisión por el cargo de delincuencia organizada, cometido con el propósito de distribuir cocaína.

Se trata del líder del grupo delincuencial Los Rojos, que también está siendo investigado por la presunta participación en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.

El ahora sentenciado fue detenido el primero de agosto de 2019 en un operativo conjunto de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina (Semar) y de la Policía Federal (PF), en el municipio de Leonardo Bravo, Guerrero, luego de que el gobierno federal anunció que se reactivarían las acciones para esclarecer el caso de Ayotzinapa.

Esta primera sentencia contra el líder de Los Rojos le fue dictada por un juez de distrito con sede en Jalisco, quien lo declaró culpable de participar en una organización criminal dedicada a distribuir clorhidrato de cocaína, desde su base, en el estado de Morelos, al resto del territorio nacional.

El Carrete deberá cumplir su sentencia en el Centro Federal de Readaptación Social número 2 Occidente, en Puente Grande, Jalisco.

Mazari Hernández enfrenta otros cuatro procesos judiciales por delincuencia organizada, y secuestro.

El Carrete ya había sido detenido en 2008 por delitos contra la salud, pero su sentencia de sólo cinco años de cárcel le permitió salir en libertad condicional un año después.

Según la carpeta de investigación del caso Ayotzinapa, en 2014 Los Rojos se disputaban con otra banda criminal, Guerreros Unidos, el control de la plaza de Iguala, Guerrero, este enfrentamiento habría llevado a confundir a los estudiantes normalistas con uno de los bandos, lo que derivó en su desaparición.

Los Rojos también son señalados como responsables del asesinato de la ex alcaldesa de Temixco, Morelos, Gisela Mota.