La crisis que generó el Covid-19 afectó a millones de alumnos y docentes en el mundo, entre ellos 23.4 millones de universitarios en América Latina y el Caribe –casi 4 millones en México–, quienes debieron enfrentar el cambio abrupto de la educación presencial a una en línea, en la que “no siempre se observaron las metodologías propias de la enseñanza virtual, lo que supone grandes tropiezos para los logros del aprendizaje, fenómeno que ya es conocido como coronateaching”, advirtieron especialistas de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

En el seminario virtual El covid-19 y la educación superior: impacto y recomendaciones, José Antonio Quinteiro, coordinador de programas del Instituto de Educación Superior para América Latina y el Caribe, destacó que otro sector más afectado es el de 1.5 millones de profesores universitarios, quienes enfrentan la incertidumbre laboral, principalmente en instituciones privadas, debido a que se prevé una baja en el número de inscripciones, pues “muchos alumnos consideran que la docencia online que se les está proporcionando no vale el costo de la matrícula ordinaria”.

Indicó que en la mayoría de los países de la región no se observa reducción en las colegiaturas de universidades privadas, por lo que muchos podrían optar por las universidades públicas.

Acompañado de expertos de Brasil, Guatemala y España, coincidieron en que el modelo de educación superior híbrido –presencial y a distancia– se impondrá en el mundo como la respuesta más eficaz ante la incertidumbre que aún genera la epidemia del Covid-19. Entre los desafíos inmediatos para las universidades públicas y privadas están el fortalecimiento de su infraestructura tecnológica y garantizar la calidad de la educación a distancia.