La pandemia del Covid-19 está poniendo a prueba nuevamente al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que enfrenta un impacto financiero, ya que la inactividad económica significará este año una disminución de más de 8 mil millones de pesos en cuotas obrero-patronales, aunado a las erogaciones contingentes por la necesidad de ampliar la prestación de servicios médicos especializados para tratar a los pacientes con coronavirus.

Pese al esfuerzo por atender la pandemia con la reorientación de recursos del presupuesto aprobado para 2020 se requerirán en lo que resta del año 9 mil 897 millones de pesos extras, que deberán tomarse de las reservas financieras y de contingencia del Instituto, se advierte en un informe del Consejo Técnico del IMSS, remitido a la Comisión Permanente.

En el mismo se precisa que se requerirá la autorización del Congreso para disponer de esa suma o que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público adapte a la baja la meta de reservas financieras en los términos en los que se requiere el ajuste.

Se resalta que en el actual gobierno, el reto de la administración del IMSS ha sido mantener finanzas sanas, pero siempre priorizando las necesidades y demandas de la población derechohabiente, con el ejercicio del presupuesto con eficiencia y transparencia, como se demuestra en contrataciones de personal –se requerían más de 5 mil antes de la pandemia– en equipo y en infraestructura.

Asimismo, se comenzaron a resolver problemas pendientes como las obras inconclusas, los hospitales abandonados, el déficit de personal y la infraestructura de mala calidad, se detalla en ese Informe sobre la situación financiera y los riesgos del IMSS 2019-2020.

Pasivos, otro problema que se acumula a la crisis

El Consejo Técnico del Instituto insiste en que a la atención del Covid-19 se suman otros problemas, como son los pasivos del organismo tripartita, que en 2019 sumaron 347 mil 988 millones de pesos, cantidad superior en 57 mil 588 millones de pesos comparada con 2018. La cifra se explica por el incremento de aportaciones a las reservas financieras y de contingencia y al fondo laboral.

El total de gastos del IMSS para el ejercicio 2019 ascendió a 486 mil 264 millones de pesos, cifra superior en 53 mil 743 millones de pesos respecto al año anterior, cifra que se explica por el incremento en los gastos de funcionamiento y por el incremento en el rubro de pagos a pensionados y jubilados del IMSS.

Se precisa que en 2019 los ingresos propios del IMSS crecieron 6.8 por ciento y el incremento más significativo fue por las cuotas obrero-patronales, que crecieron en términos reales 5 por ciento, superiores en 7 mil 174 millones de pesos a lo presupuestado y se obtuvieron por las acciones de fiscalización, simplificación, digitalización de trámites y por el crecimiento de 342 mil 77 puestos de trabajo. La pandemia cambió el panorama, ya que la inactividad económica disminuirá las cuotas y la atención de derechohabientes y no derechohabientes ha requerido acciones inéditas en capacitación y contratación de personal, adquisiciones extraordinarias y reconversión de unidades.