De 2018 a la fecha, se han realizado 2 millones 500 mil contratos para adquisiciones gubernamentales en todos los niveles de la administración pública del país, de las cuales 80 por ciento se han dado por adjudicación directa y apenas 20 por ciento mediante licitación. Por ello, es fundamental fortalecer a las instancias que realizan auditorías externas del ejercicio de los recursos públicos.

Así lo señalaron los participantes del video foro Contrataciones abiertas en el marco de la emergencia sanitaria por Covid-19, organizado por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) y organizaciones civiles.

Los especialistas señalaron que uno de los procesos donde más riesgo de corrupción hay es en las compras públicas, por lo que la labor y permanencia de órganos garantes de transparencia o de instancias como la Auditoría Superior de la Federación son fundamentales para cumplir con los postulados de anticorrupción y de austeridad republicana enarbolados por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El comisionado del Inai, Óscar Guerra Ford, indicó que del total de compras gubernamentales reportadas de 2018 a la fecha, 800 mil se realizaron a escala federal, y el porcentaje de adjudicación no varía: 80 por ciento es directo y 20 por licitación.

Con el objetivo de hacer pública la información sobre esos registros, el Inai puso en operación una plataforma de contrataciones abiertas para transparentar no sólo los gastos en materia de salud, en medio de la crisis sanitaria por el Covid-19, sino para transparentar las inversiones que hace el Estado en todos sus niveles.

El comisionado remarcó que el nivel de la corrupción en México es tan grande que hoy representa poco más de 10 por ciento del PIB, lo que está por encima de todo el sector agrícola o primario.

Su compañera, Josefina Román, planteó que el acceso público a los datos de las contrataciones abiertas genera confianza y garantiza que los recursos que los gobiernos gastan sean destinados a mejorar la provisión de de bienes y servicios públicos.

En tanto, el comisionado presidente del Inai, Francisco Javier Acuña, indicó que este tipo de contrataciones son las que acaparan las mayores suspicacias, no sólo en México, sino en el mundo, pues son nichos de oportunidad por medio de las contrataciones a modo.

Este nuevo gobierno ha predicado que dos de sus principales ejes son la austeridad republicana y el combate a la corrupción, pero eso no funciona por decreto, por el contrario, hay que comprobarlo, y para que ambas se cumplan es imprescindible la transparencia directa en cada operación y programa, al igual que revisiones desde órganos externos”, enfatizó.