La hambruna, riesgo latente
Miércoles 29 de abril de 2020, p. 7
Ginebra. Con 90 mil millones de dólares se podría financiar ayuda económica, alimentos y una respuesta sanitaria a la pandemia del coronavirus para 700 millones de las personas más vulnerables del planeta, aseguró ayer Mark Lowcock, subsecretario de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para Asuntos Humanitarios y coordinador de Socorro de Emergencia .
La cifra supone apenas uno por ciento del paquete de estímulos de 8 billones de dólares aprobados por los 20 países más ricos del mundo para salvaguardar la economía global. La mayoría de los expertos coincide en que el pico de la pandemia de Covid-19 no ha tocado techo en las partes más pobres del mundo, algo que podría ocurrir en los próximos tres a seis meses, declaró Lowcock en una conferencia emitida en video.
Unos 700 millones de personas –10 por ciento de la población mundial– son especialmente vulnerables y están concentrados en 30 o 40 países que ya reciben ayuda humanitaria y verán un gran descenso en sus ingresos conforme el virus se extienda y los gobiernos impongan cuarentenas y restricciones.
Si quisieran protegerles contra esa caída de ingresos, entonces probablemente con unos 60 mil millones de dólares podrían hacerlo
, añadió Lowcock. Y con unos 30 mil millones de dólares, señaló, se conseguiría comida para la gente en peligro de sufrir hambrunas y se financiaría la respuesta sanitaria a la enfermedad.
Es probable que dos tercios de esos 90 mil millones de dólares podrían llegar de instituciones financieras internacionales, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, señaló el responsable de derechos humanos, los cuales tendrían que reducir las tasas de interés y ofrecer algo de alivio de deuda.
El tercio restante podría financiarse con un aumento puntual de la ayuda para el desarrollo de los gobiernos.
El secretario general de la ONU, António Guterres, señaló que la pandemia de coronavirus puso al desnudo la fragilidad de las sociedades. Sin embargo, añadió, si los gobiernos colaboran para enfrentar los retos comunes, como el cambio climático, puede ser una oportunidad para reconstruir nuestro mundo para bien
.
La pandemia alcanzó ayer una saldo de 216 mil 857 muertos, 3 millones 111 mil 730 contagiados y 925 mil 442 recuperados en el mundo, según la Universidad Johns Hopkins.
España empezará a vivir su nueva normalidad
a finales de junio, cuando el gobierno, presidido por el socialista Pedro Sánchez, prevé culminar lo que denominó la desescalada
y que se llevará a cabo en cuatro fases, reportó Armando G. Tejeda, corresponsal de La Jornada en esa nación (nota completa en http://tiny.cc/mifznz).
El mandatario también anunció que mantendrá el estado de alarma, el cual supone medidas excepcionales, como la mutilación de las libertades, y que los estudiantes volverán a los colegios de forma regular hasta septiembre.
En Francia, el primer ministro, Edouard Philippe, anunció la reapertura a partir del 11 de mayo de todos los comercios y el uso obligatorio de mascarillas en el transporte público, en una flexibilización del confinamiento impuesto desde el 17 de marzo.
Tendremos que vivir con el virus
, dijo Philippe, quien precisó que seguirán cerrados hasta nuevo aviso los grandes museos, como el Louvre, cines, teatros y salas de concierto.
Rusia planea un levantamiento progresivo del confinamiento a partir del 12 de mayo, aunque el presidente Vladimir Putin juzgó que su país aún no alcanzó el pico de la epidemia. La situación sigue siendo difícil
, reconoció.
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, anunció el desconfinamiento progresivo de Grecia a partir del 4 de mayo, empezando por los pequeños comercios y las peluquerías y salones de belleza.
Casi un mes después de que Bangladesh ordenó el cierre de las fábricas de ropa para evitar la propagación del coronavirus, la industria reabrió cientos de ellas a pesar del riesgo de contagio, al asegurar que se cumplieron los protocolos.