Satanizar el VIH y centrarlo en ciertas personas como gays, bisexuales y transexuales no ha provocado que se registren menos infecciones, por ello es urgente que se hable en las escuelas y hogares como lo que es: un virus que puede adquirir cualquiera, coincidieron especialistas.

Alaín Pinzón, activista integrante de la organización Vive Libre, expuso que es necesario cambiarle la cara a este padecimiento, dejar de verlo desde el sufrimiento, el dolor y el pasado, para quienes nos recriminamos esto por castigo, y visibilizarlo a partir de que somos personas productivas, tenemos trabajo, derecho a familia, a tener sexo.

No obstante, el especialista reconoció que los portadores del virus se significan de acuerdo con sus diferentes contextos, pues la realidad de una mujer trasgénero, trabajadora sexual, sin acceso a servicios de salud libres de discriminación y sin una red de apoyo familiar es muy diferente a la de un hombre con empleo formal y familia quelo respalde.

En el conversatorio VIH Diálogos en Positivo, Axel Bautista, activista, señaló que el VIH se debe discutir desde sus diversas dimensiones, no sólo como se ha hecho, que únicamente está relacionado con el uso del condón y la sexualidad.

Una oportunidad, no sólo pérdida

Miriam Campos, sicóloga voluntaria de Vive Libre, señaló que el padecimiento se puede ver como una pérdida de muchas cuestiones como de sa-lud, pero también puede ser una oportunidad para que las personas se conozcan mucho mejor, exploren su existencia y a través de una situación que no pueden cambiar, a lo mejor decidir qué hacer con lo que se es-tá viviendo.

Indicó que la discriminación puede empezar desde la misma persona portadora del virus, al no aceptar su condición. Si no se admite y se piensa que tener el virus te va a aislar, te hará ver diferente, desde ahí empieza el rechazo.

Del mismo modo, la especialista hizo un llamado a la población a realizarse la prueba para detectar el VIH, pues todavía hay un alto porcentaje de portadores que desconocen su condición.