El gobierno de Estados Unidos habló con las autoridades mexicanas sobre el asilo político que el Estado mexicano concedió a Evo Morales Ayma, presidente en el exilio de Bolivia sin que existiera problema alguno por ello, dijo ayer un funcionario estadunidense de alto nivel.

En conferencia de prensa telefónica, Kevin O’Reilly, subsecretario de Estado Adjunto en la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado estadunidense, descartó que la protección brindada a Morales Ayma haya provocado tensiones bilaterales al asegurar que tenemos una amplia relación con México y hemos hablado sobre la oferta de asilo, no tenemos ningún problema con esto.

Agregó que el asilo forma parte de la “tradición en la diplomacia latinoamericana y es parte integral de la tradición mexicana (…) Apreciamos la decisión de México al ofrecer el asilo al señor Morales después del abandono de su cargo hace una semana”.

Morales Ayma llegó el martes 12 de noviembre a tierras mexicanas, donde fue acogido por el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, tras recibir asilo político por parte del gobier-no mexicano.

La postura de la administración del presidente estadunidense Donald Trump frente a los acontecimientos suscitados en Bolivia ha sido distinta a la mexicana. Mientras la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador reconoce que hubo un golpe de Estado en contra del gobierno de Evo Morales, en el país vecino del norte se asegura que hubo un fraude electoral.

En este contexto, Kevin O’Reilly declaró: Nuestra posición siempre ha sido clara: que todos tienen el derecho de participar plenamente, cada corriente política, en el futuro de su país según la constitución y las leyes de Bolivia, pero los que han participado en el fraude tienen que dar un paso para atrás y dejar al proceso democrático avanzar.

Consideró que Bolivia se encuentra en medio de un deba-te muy fructífero buscando una salida a su situación actual, en el cual, incluso miembros del partido del mandatario boliviano en exilio, el Movimiento al Socialismo (MAS) están participando muy activamente para encontrar una solución democrática.