Con la premisa de que los hombres tienen mayor tendencia a escuchar a otros hombres sobre temas de respeto hacia las mujeres, la plataforma Dejemos de Hacerlo busca incidir en el combate a la violencia contra las mujeres, difundir lo que es el acoso sexual, así como exponer ejemplos de masculinidad positiva en las que se reconozca que pueden romper estereotipos, ser sensibles y expresar sus sentimientos.

Refiere que a escala internacional muchas de las iniciativas dirigidas a disminuir el acoso están enfocadas a las mujeres, para sensibilizarlas sobre sus derechos y responsabilizarlas sobre su propia seguridad. No obstante, advierte, es importante que los hombres se involucren activamente.

Expone que para lograr frenar las acciones violentas, primero las personas deben reconocerlas. Respecto del hostigamiento sexual, señala, los varones pudieran hacerlo por presión de los amigos, sentirse más hombres, por desconocimiento, porque se les pasaron las copas o tratando de ligar.

Por eso, Dejemos de Hacerlo se enfoca en que los hombres se hablen entre sí para poder identificar y reconocer los tipos de acoso sexual, y como parte de la campaña se han colocado en espacios públicos, como el transporte, parques, centros comerciales y universidades, una serie de mensajes para ayudarlos a reconocer los tipos de hostigamiento a los que se puede incurrir, e impulsar un ejercicio de autocrítica sobre si en algún momento de su vida han acosado a una mujer, señala.

Expone que en el país una de cada tres mujeres ha experimentado algún tipo de violencia sexual en espacios públicos. Siete de cada 10 agresiones han sido piropos groseros u ofensivos, intimidación, acecho, abuso sexual, intento de violación y violación.

En la plataforma, este movimiento informa los tipos de acoso sexual que algunos hombres realizan de manera intencional, y que no necesariamente implican contacto físico pero generan daño o sufrimiento.