Sociedad y Justicia
Ver día anteriorMartes 29 de octubre de 2019Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
A la baja, ilícitos en hábitat de la Monarca, pero le afecta la caída de árboles
 
Periódico La Jornada
Martes 29 de octubre de 2019, p. 33

A través del operativo de vigilancia permanente que se tiene con la Guardia Nacional desde 2016 en la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca, a la fecha se han realizado mil 280 acciones tácticas operativas para disminuir los ilícitos ambientales en la zona y se continúa con la atención de incendios forestales, plagas y enfermedades, con la finalidad de mantener la salud de los ecosistemas forestales de la región, señaló Gloria Tavera Alonso, directora regional del Centro y Eje Volcánico de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).

Sin embargo, indicó que aunque la vigilancia permanente disminuyó de 80 a 25 elementos por el cambio de la Gendarmería Ambiental a la Guardia Nacional, se está capacitando a nuevos elementos. Es el ajuste que se tiene que hacer de la gente que pasa de una institución a otra, es la línea normal de cuando un programa se cierra y otro se abre.

En ese sentido informó que de marzo de 2018 al mismo mes de 2019 se presentaron 28 incendios forestales, 22 en Michoacán y seis en el estado de México, que fueron atendidos por dos brigadas del Programa de Conservación para el Desarrollo.

En conferencia donde se presentaron los resultados de la supervisión Forestal de la Mariposa Monarca 2018-2019, Jorge Rickards, director general del Fondo Mundial para la Naturaleza México, señaló que la degradación forestal en cinco hectáreas de la reserva disminuyó 25.4 por ciento, de acuerdo con el monitoreo que realizan junto con el Instituto de Biología de la UNAM, Fundación Telmex, Telcel y Conanp.

Foto
▲ Disminuyen tala ilegal e incendios en Michoacán y estado de México, pero sigue la sequía.Foto Ignacio Juárez

Pero no sólo eso, aseguró que la tala clandestina en el lugar también se redujo, al pasar de 1.43 a sólo 0.43 hectáreas, mientras que las pérdidas por saneamiento forestal se contrajeron de 1.35 a 0.38 hectáreas en el mismo periodo. Las principales causas de degradación fueron la sequía y caída de árboles que afectaron 4.19 hectáreas, con un ligero aumento respecto al año anterior cuando se registraron estragos en 3.93 hectáreas.

La degradación forestal disminuye debido a que no hubo tala clandestina a gran escala. Tampoco tormentas graves como la que afectó a la reserva en 2016. Se ha logrado conservar su zona núcleo gracias al compromiso de los ejidos, comunidades indígenas y brigadistas, que vigilan los bosques a cambio del pago por servicios ambientales, a la vez que generamos opciones productivas para que la reserva sea fuente de vida y desarrollo para la gente.