Miércoles 23 de octubre de 2019, p. 25
Beirut. Los libaneses parecían decididos ayer a no rendirse, en el sexto día de protestas contra la clase política, pese a las reformas urgentes anunciadas la víspera por el gobierno, que no surtieron efecto tras años de parálisis política. Los bancos continuaron cerrados y el país paralizado.