Domingo 20 de octubre de 2019, p. 19
La transformación digital en el sistema financiero es una realidad, y ante ello las instituciones deben optar porque todas las operaciones que anteriormente se realizaban en sucursal pasen a una aplicación móvil, afirmó Rafael Fragoso, director de banca móvil de Banorte.
En entrevista, manifestó que una de las principales apuestas del banco, en la actualidad, es porque los clientes puedan efectuar cualquier operación o transacción desde las vías electrónicas, como solicitar tarjeta de crédito, depósitos e incluso comprar instrumentos de inversión.
Expuso que ahora las instituciones financieras deben estar orientadas a satisfacer las demandas y necesidades de los clientes, quienes ya exigen agilidad en cualquier trámite y eficientar tiempos, por lo que es ahí adonde va ahora la banca digital.
Es un tema de transformación y de escuchar. La banca digital va a lo siguiente: todas aquellas operaciones donde realmente no necesites la presencia del cliente en una sucursal lo hagas en línea, y que el tiempo que hubiera tomado ir a unas oficinas se pueda utilizar de manera cotidiana.
Precisó que ante la creciente demanda de servicios bancarios desde teléfonos celulares, ya es posible contratar tarjetas de crédito o débito en línea, consultar estados de cuenta y comprar unidades de inversión o realizar la portabilidad de nómina a otros bancos.
Eso es lo que viene. Desde un celular o una computadora hacer todo eso. Este modelo ya tiene un servicio diferente para la sucursal. Ahora se convierten en centro de operaciones o de negocios. Ya no es aquella en la que los ejecutivos conocían a sus clientes, sino únicamente asesorías.
Puntualizó que actualmente la aplicación de Banorte en línea tiene incorporados más de 2.5 millones de clientes digitales, y se espera terminar con 3 millones sólo en esa plataforma.
Rafael Fragroso detalló que con la puesta en marcha de open banking en México, el año próximo –modelo en el que no únicamente los bancos, sino también los intermediarios financieros, podrán tener acceso a los datos de las clientes con su autorización para ofrecer servicios–, el sistema financiero tendrá una nueva consolidación.
“Vemos con buenos ojos el open banking. Será un gran reto para nosotros, porque tenemos que encontrar la manera de satisfacer al cliente de la mejor forma. Este caso permitirá que muchas Fintech y otras firmas puedan satisfacerlos. Entonces, más nos vale como bancos estar preparados y siempre conscientes de qué es lo que se necesita. Nos sentimos tranquilos, mas no cómodos aún”, añadió.
Comentó que el uso de los datos de los incorporados al sistema financiero está garantizado y no debe ser obstáculo para que las personas se sientan seguras, pues el acceso a información confidencial por terceros con el open banking solamente se llevará a cabo si uno lo autoriza.