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Montaje vincula el chile con la mexicanidad
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▲ Richard Viqueira (Cholo) y Valentina Garibay (Adelita) en una escena del montaje que se presenta en la sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque. La temporada concluirá el 22 de octubre.Foto Víctor Zúñiga Convoy/Inbal
 
Periódico La Jornada
Viernes 13 de septiembre de 2019, p. 4

Una investigación sobre el chile, cultivo originario del país, hizo que el dramaturgo Richard Viqueira creara la puesta en escena Desvenar, en la que reflexiona sobre la idiosincrasia de los mexicanos. Esa obra desarrolla temporada en la sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque.

Viqueira explora las múltiples posibilidades del chile en nuestra cultura y de ahí indaga en la política, el amor, la música y la historia.

En entrevista con La Jornada, el también actor comparte que como buen comensal se interesa por ese picante, pero más allá del aspecto culinario quería hurgar en la relación que tiene en la vida de los mexicanos.

‘‘Resulta paradójico que el chile por su naturaleza pica para que no se coma, pero se come; es muy picante, arde al comerlo y produce un dolor, así que hice una metáfora de esta situación mexicana masoquista.”

El montaje es una reflexión en torno al chile desde los puntos de vista culinario, alburero, histórico, religioso, botánico, patriótico y patriotero. ‘‘La obra ahonda en lo que realmente nos define como mexicanos y me parece que el chile permite dilucidar muchos aspectos sobre lo mexicano, la política y nuestra idiosincrasia”, añade.

Triángulo amoroso entre Adelita, Pachuco y Cholo

En la obra hay tres distinguidos personajes: Adelita, Pachuco y Cholo se ven inmersos en un triángulo amoroso. Un día, Pachuco regresa a México, su país de origen, para rencontrarse con Adelita, su pareja, pero desafortunadamente descubre que lo ha sustituido Cholo, quien anhela retornar a Estados Unidos y olvidarse de las salsas picosas.

Los intérpretes hacen referencia a personajes icónicos del folclor mexicano con los que rinden homenaje a la cultura desde las costumbres, creencias, artesanías y canciones de carácter tradicional y popular.

La estética y la propuesta se enfocan en la música, además de evocar acentos y formas de expresión oral de varias zonas del territorio nacional.

En la historia presentan una tríada de mexicanos: Adelita, Pachuco y Cholo y mediante el alimento quedan representados esos tres puntos de la mexicanidad, como los que se van a Estados Unidos a buscar nuevas oportunidades pero en realidad quieren regresar a su casa a comer chilaquiles o un buen pozole.

‘‘Cholo es un personaje que en realidad odia México; siempre quiere irse de aquí, pero nunca lo consigue. El tercer elemento es Adelita, quien representa a los mexicanos que nos quedamos”.

Para Viqueira, Adelita es la patria, porque en realidad las que se quedan son siempre las mujeres y mantienen al país a pesar de sus circunstancias.

Durante la puesta en escena en la que actúan Valentina Garibay, Ángel Luna y Richard Viqueira hay un juego de palabras porque al dramaturgo le interesan más que los elementos visuales, los verbales musicales que distinguen a los mexicanos.

A manera de ejemplo menciona que en el norte se habla diferente o la musicalidad que tienen los merolicos o cómo se escucha a los habitantes de Yucatán.

Las funciones de la obra Desvenar, escrita y dirigida por Richard Viqueira, son lunes y martes a las 20 horas en la sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque (Campo Marte y Paseo de la Reforma s/n, Bosque de Chapultepec, estación Auditorio del Metro). La temporada concluirá el 22 de octubre.