San Antonio, Texas. El Tri pasó de lo sublime a lo ridículo, de golear a Estados Unidos a caer aplastado por el equipo B de Argentina, representativo que prescindió de casi todas sus figuras, pero que con Lautaro Martínez como eficaz romperredes, le pegó un humillante baile a la legión europea tricolor.

El seleccionador Gerardo Tata Martino perdió su racha invicta de 13 partidos, la cual se redujo a mero espejismo debido al pobre nivel de sus anteriores rivales, sin embargo, esta noche la albiceleste los devolvió a su cruda realidad.

La fiesta se apagó muy pronto en el estadio Alamodome, donde la afición hizo gran entrada, se presentó con sombreros y sarapes para festejar el mes patrio. En los primeros cinco minutos coreó con entusiasmo ‘oles’ para acompañar los pases que hilvanaron los mexicanos, pero pronto hizo agua la frágil defensa que integraron Carlos Salcedo, Édson Álvarez y Néstor Araujo, éste último tuvo una noche fatídica plagada de errores.

Al minuto 16 Lautaro (22 años) encontró toda clase de facilidades y entre tres rivales definió sin problemas para vencer al portero Guillermo Ochoa. Cinco minutos después el propio Martínez recibió pase filtrado de Ezequiel Palacios, y definió el segundo tanto con tiro cruzado.

El Tri era una manojo de nervios ante cada embestida de Lautaro, quien llegó casi a línea de fondo al minuto 31, quiso centrar de espaldas y Carlos Salcedo desvió con el brazo. Se decretó la pena máxima a favor de la albiceleste, misma que concretó Leandro Paredes con disparo a la derecha de Ochoa, quien alcanzó a tocar el esférico pero no pudo impedir el 3-0.

Héctor Herrera, inactivo en el Atlético de Madrid, confirmó su mal momento y fue amonestado al minuto 36; dos minutos más tarde Araujo intentó desahogar su zona, quiso hacerle un túnel a Lautaro, y el atacante del Inter de Milán fácilmente retuvo el balón y encajó el cuarto tanto, que significó una losa muy pesada para el desdibujado Tri.

En el complemento ya no apareció Martínez, la tarea estaba hecha y el técnico Lionel Scaloni lo mandó a descansar. Argentina bajó el ritmo. Martino sacó al Tecatito Corona y a Herrera para el ingreso de Marco Fabián y Carlos Rodríguez, hubo leve mejoría, al 73 el árbitro no quiso marcar un penal sobre el Chucky Lozano y el marcador ya no se movió, sobre todo gracias a un par de buenas intervenciones de Ochoa.