La Corte a dicho que la alocución de odio no está protegida por la Constitución
Sábado 17 de agosto de 2019, p. 13
Si una mujer fue violada, no ponemos el énfasis en el violador sino en que, si la mujer estaba alcoholizada, si usaba minifalda y qué hacía afuera de su casa a las diez u once de la noche; ese discurso genera violencia y tenemos que acabar con él, afirmó el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar.
Durante la inauguración de la Reunión Anual del Capítulo México 2019 de la Asociación Internacional de Mujeres Juezas, Zaldívar señaló se debe terminar con el discurso machista
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Es muy relevante hacer esfuerzos en todas las instituciones para cambiar la educación desde el kinder que estamos dando a las niñas y a los niños para entender en ellos que tenemos un mundo en el que todos somos diferentes, pero todos somos iguales. Y en que las mujeres tienen plenos derechos para acceder hasta dónde quieran y puedan y que los hombres tenemos no sólo la obligación de respetarlas y de tratarlas con dignidad, sino apoyarlas en todo lo que esté de nuestra parte
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El presidente de la Corte sostuvo que “el cambio cultural sin duda es de la mayor relevancia. El cambio y el cuidado y el cambio en el lenguaje, creo que acontecimientos recientes nos acreditan lamentablemente de manera muy fuerte; que las palabras importan, porque las palabras matan; las palabras generan violencia, las palabras humillan, las palabras discriminan.
Por eso la Suprema Corte mexicana ha dicho que el discurso de odio no está protegido por la Constitución. Y un discurso de odio es el discurso machista, el discurso que humilla y genera en la mujer como si fuera un objeto de pertenencia de los hombres del cual podemos usar con absoluta libertad. Este discurso machista tiene que ser combatido de manera decidida porque es a partir de ese discurso, de esos estereotipos, en que los hombres nos sentimos con derecho de abusar de la mujer
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Luego, puntualizó: en los medios tenemos un discurso machista, muy sutil que casi no se nota y que como no se nota es sumamente perverso”, y llamó a modificar los estereotipos.