La directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Audrey Azoulay, condenó el asesinato de tres periodistas mexicanos, Édgar Alberto Nava López, Rogelio Barragán Pérez y Jorge Ruiz Vázquez, cometidos entre finales de julio y el 2 de agosto.

La funcionaria instó a las autoridades incrementar las medidas de protección para los profesionales de la comunicación y exhibió que los tres reporteros habían denunciado previamente intimidaciones o amenazas de muerte a causa de su trabajo.

Por otro lado, la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Unesco firmaron un convenio de cooperación para implementar los Indicadores de Desarrollo Mediático (IDM) del organismo multilateral, así como la creación de un mecanismo para impulsar el periodismo de investigación en México.

El instrumento fue firmado en reunión privada por el secretario Marcelo Ebrard, el representante de la Unesco en México, Frédéric Vacheron y, como testigo de honor, Jesús Ramírez Cuevas, vocero de la Presidencia.

Los IDM establecen un contexto en el que los medios y las instituciones pueden contribuir a la gobernabilidad y al desarrollo democrático. Se trata de cerca de 100 indicadores estructurados en cinco categorías de análisis que buscan profundizar en asuntos como la existencia de un marco jurídico, político y reglamentario que proteja y promueva la libertad de expresión e información, entre otros.

Miden, entre otras cosas, si el lenguaje e idioma que emplean los medios reflejan la diversidad lingüística de la zona de su público, o si los medios comunitarios cuentan con las condiciones técnicas para llegar hasta las zonas marginadas.