El panorama para la NFL en México es optimista, según describe el director de la oficina de la Liga en nuestro país, Arturo Olivé. Lejos de la cancelación del año pasado, cuando los equipos involucrados rechazaron jugar en el estadio Azteca por el deterioro del pasto, la situación actual es distinta, dice el directivo y asegura que el estado de la cancha es espectacular.

La cancelación del partido en 2018 no afectó la confianza en México, como segundo mercado más importante para la NFL. De hecho, explica Olivé, el contrato de los tres juegos que se disputarían en el estadio Azteca, el tercero no se realizó por la situación del pasto, se extendió a tres duelos más, el primero de los cuales se realizará entre los Jefes de Kansas y los Cargadores de Los Ángeles, el próximo 18 de noviembre.

Este es el primero de tres firmados en un nuevo contrato, comenta Olivé, quien descarta que se repita un escenario como el que derivó en la cancelación del juego pasado.

El estado de la cancha del Azteca es espectacular, he realizado revisiones personalmente y acompañado de visores de la NFL y están impresionados con lo que vieron; todo está funcionando de acuerdo con el plan que opera desde enero y que incluye revisiones frecuentes con la NFL.

Con la llegada del nuevo gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, en el que se informó que no se aportará dinero del erario para este tipo de espectáculos, existían dudas sobre la permanencia de México en el calendario de la NFL. Mientras la Fórmula Uno se volvió el tema más recurrente, el futbol americano era un enigma.

Olivé aclara que los tres juegos firmados en el nuevo contrato con la NFL mantienen el apoyo del gobierno federal por medio del Consejo de Promoción Turística de México, órgano ya disuelto, pero cuyos acuerdos firmados respetó la actual administración.

El gobierno federal está presente con la marca México, precisa Olivé; y con el gobierno de la Ciudad de México también mantenemos los planes para todas las actividades previas al duelo como ha ocurrido antes.

El directivo de NFL en México asegura que no fue necesario restañar la confianza de la Liga después de la cancelación del juego de 2018 ni por el panorama que cambió tras la sucesión presidencial. Por el contrario, apunta que a quien sí debían agradecer es a la afición mexicana que fueron pacientes.

Estamos agradecidos con su paciencia y comprensión de que los sucesos del año pasado ocurrieron por circunstancias fuera del control de la Liga, señala.

Y sobre el porvenir de la NFL una vez que se cumplan los tres partidos firmados, Olivé mantiene el optimismo, pues confía que quedan tres años para trabajar sobre el futuro del calendario de juegos de la NFL en México y cómo mantenerlos.

Para el partido del próximo 18 de noviembre entre Jefes y Cargadores los boletos saldrán en preventa para clientes de Banorte el 6 de agosto. El 8 del mismo mes será la venta al público en general, previo registro en la página de la NFL. Los costos van de 800 a 4 mil pesos en admisión general; el pase hospitality tendrá un costo de 7 mil 500 pesos.