San Juan. Puerto Rico decretó una moratoria en el pago de la deuda de 422 millones de dólares del Banco Gubernamental de Fomento (BGF, central) que venció este domingo, por lo que el gobierno se expone a múltiples demandas judiciales. El gobernante Alejandro García Padilla anunció el impago e indicó que ponía en vigor de modo temporal la ley de moratoria aprobada en abril por el Congreso local al no tener el estado libre asociado a Estados Unidos solvencia para honrar el pago. Anteriormente, la isla incurrió en dos impagos que afectaron a acreedores locales, como los proveedores de servicios y las cooperativas, pero en esta ocasión incluye a bonistas de Wall Street. Con una deuda pública que ronda los 70 mil millones de dólares, Puerto Rico se encuentra prácticamente insolvente, ya que la liquidez del BGF es apenas de 562 millones de dólares.