Efectivos franceses y británicos sin uniforme se encuentran desplegados desde hace varias semanas en el frente este de Libia junto a los insurrectos, constató un reportero de Afp.

Están en la refinería Zuwaitina, paralizada por el conflicto y convertida en centro de comando rebelde para el frente este, unos 150 kilómetros al suroeste de Bengasi, sede del Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano político de la insurrección libia.

La refinería, que cubre varios kilómetros cuadrados en el desierto libio sobre la costa mediterránea, es el cuartel general de Fawzi Bukatif, comandante de los alzados para todo el frente.

Franceses y británicos de civil están alojados cerca de una de las pistas de aterrizaje de la refinería. Disponen de medios de comunicación, una sala de radio con las paredes cubiertas de mapas militares y están instalados a pocos pasos del centro de comando de Bukatif.

Desde finales de abril, Gran Bretaña, Francia, Italia, Egipto y Estados Unidos anunciaron que habían enviado asesores militares para ayudar al CNT.

Durante las últimas semanas, la refinería fue utilizada como centro de operaciones rebelde en la batalla de Brega, ciudad portuaria ubicada 90 kilómetros más al este, de donde los rebeldes expulsaron a las fuerzas leales a Muammar Kadafi en una ofensiva respaldada por aviones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

Tras la toma de Trípoli por los opositores armados, los leales a Kadafi retrocedieron más de un centenar de kilómetros hacia el oeste y se detuvieron en Ben Jawad, 140 kilómetros al este de Sirte, ciudad natal y bastión del líder libio.

El comandante Bukatif se disponía en estos días a trasladar su centro de comando de Zuwaitina a la localidad de Ras Lanuf, a unos 20 kilómetros de Ben Jawad.