Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a los gobernadores de todo el país interceder para que los legisladores federales de sus respectivos estados apoyen la inminente iniciativa de reforma constitucional por la cual la Guardia Nacional se incorpore a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El titular del Ejecutivo mexicano aprovechó la ceremonia por el tercer aniversario de la fundación de esta corporación de seguridad para insistir en la pertinencia de adherirla a la Defensa a fin de “dejarla en buenas manos” y así blindarla.
“Estoy seguro que los gobernadores nos van a ayudar a convencer a los legisladores, y que es importante que dejemos bien consolidada y blindada esta institución que se creó para garantizar la paz y la tranquilidad de nuestro país en beneficio de nuestro pueblo”, subrayó en su discurso en las instalaciones del Colegio Militar.
El presidente rechazó que su propuesta para que la Guardia Nacional forme parte de la Sedena sea un paso para militarizar el país o poner en riesgo los derechos humanos –como lo han afirmado quienes se oponen a esa idea— , pues aseguró que su gobierno civil no dará la orden de reprimir a las ciudadanía y confió en que en esa línea se mantengan futuras administraciones.
“Tenemos que tomar en cuenta que si no hay la orden de reprimir al pueblo, no hay nada qué temer y estoy convencido de que los gobiernos civiles en el futuro va a ser gente sensible que cada vez van a profesar más amor a nuestro pueblo, más amor al prójimo”.
Otro ámbito que López Obrador destacó es que desde antes que él asumiera la Presidencia de la República y, en consecuencia, de que se creara la Guardia Nacional, en las escuelas de formación militar, tanto de la Marina como del Ejército, la materia de derechos humanos ya era parte de su currícula y planes de estudio, lo cual se incorporó a la capacitación de los efectivos de la nueva corporación.
“Por eso hay que darle la confianza a esta nueva institución y dejarla en buenas manos, cuidarla para que permanezca, que no sea flor de un sexenio, de dos; sino que sea una institución que dure siglos, como las guardias nacionales en otros países que ya llevan siglos, desde que se fundaron, son instituciones muy consolidadas, que por cierto, (algunas) están vinculadas en varios países a las fuerzas armadas”.
El mandatario recordó que cuando planteó la creación de la Guardia Nacional, hace tres años, en ambas cámaras (Diputados y Senadores) contó con el apoyo de todas las fuerzas políticas –incluida la oposición— y por unanimidad se aprobó en sendos espacios legislativos la reforma constitucional para dar paso a esa corporación.
Hoy, “tenemos que lograr que la Guardia Nacional dependa de la Sedena. Ese es el propósito. Si la dejamos dependiendo de una Secretaría o una institución sin el profesionalismo, la disciplina, la doctrina, vamos a cometer el mismo error (que con la Policía Federal) y no podemos ya equivocarnos”.