Ciudad de México. Ante familiares y víctimas de la guerra sucia, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresensio Sandoval, ofreció sumar la institución a los esfuerzos del Estado mexicano “para generar mecanismos de esclarecimientos de los hechos pasados, la dignificación de las víctimas y el acceso a la memoria histórica”. Durante su exposición sostuvo que durante aquellos años, el Estado mexicano adoptó decisiones que buscaron garantizar la seguridad, el orden constitucional y restablecimiento del Estado de derecho.
Sin embargo, “determinadas acciones implicaron, lamentablemente, que un sector de la sociedad (…) se alejara de principios de la legalidad y humanidad, valores que nunca pueden estar separados de la vida institucional. La historia es uno de los activos más preciados que puede tener una nación. Debemos aprender de sus orígenes, para entender el presente y sin ella, la historia, se hace imposible concebir el futuro.
En un acto efectuado en el Campo Militar Número Uno, ante la presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, Sandoval reivindicó a los militares caídos en los tiempos de la guerra sucia.
Entre gritos de algunos familiares de víctimas de “¡vivos se los llevaron, vivos los queremos!", el general se dirigió a los parientes de esos militares caídos: “Con orgullo les expreso que el propio mandatario autorizó a inscribir nombres de familiares fallecidos en el monumento a los caídos, a los que se tributó sentido homenaje”.
Larga intervención del secretario de la Defensa Nacional, en la que dedicó una parte a los uniformados: "En este significativo evento, me dirijo a todos los que portan uniforme".
Señaló que en la ceremonia había "algunos de los militares y familiares afectados por los hechos ocurrido en aquel entonces. Por instrucciones, se analiza un mecanismo integral de reconciliación social como parte del patrimonio colectivo del pueblo".