Houston. La firma estadunidense Talos Energy suspendió de forma temporal la búsqueda de un arbitraje contra México en medio de conversaciones de alto nivel sobre Zama, uno de los proyectos petroleros costa afuera más emblemáticos del país, informaron cinco fuentes conocedoras del asunto.
Talos presentó en septiembre al gobierno mexicano notificaciones de disputa en virtud del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), un paso previo a la introducción de un reclamo de arbitraje internacional.
La medida siguió a la decisión de México de seleccionar a Petróleos Mexicanos (Pemex) como operador del campo Zama, con unos 850 millones de barriles de petróleo equivalentes, que comparten las empresas.
Sin embargo, ahora Talos está involucrada en conversaciones que podrían dar al consorcio que lidera mayor poder de decisión en el desarrollo del proyecto.
Se espera que las discusiones continúen durante varias semanas, comentó una de las fuentes.
Rol más significativo en la toma de decisiones
“(El arbitraje) todavía está sobre la mesa, pero Talos no lo está persiguiendo en este momento”, manifestó una de las fuentes. “Realmente está haciendo todo lo posible por llegar a un acuerdo sobre cómo se puede operar el proyecto de manera que Talos tenga un rol significativo”, agregó.
La decisión se produjo tras una reunión clave en abril encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, que dio inicio a las conversaciones de alto nivel, según una de las fuentes.
Las discusiones, que incluyen a ejecutivos de Talos y funcionarios de la Secretaría de Energía, han planteado la posibilidad de que, incluso con Pemex como operador, el productor estadunidense y sus socios Harbor Energy y Wintershall Dea tengan una voz fuerte en el desarrollo técnico y comercial del campo, señalaron las fuentes.
El consorcio ha invertido casi 350 millones de dólares en el proyecto. Talos tiene una experiencia más amplia que Pemex operando en aguas de 150 metros de profundidad y más.
La compañía y sus socios han continuado las conversaciones con Pemex sobre los aspectos técnicos de un plan de desarrollo conjunto que debe presentarse al regulador petrolero de México hasta 12 meses después de la selección del operador, comentaron dos de las personas consultadas.