Monterrey, NL., Para poner fin a la crisis hídrica y garantizar el abasto de agua para los habitantes de Monterrey y su zona metropolitana, el gobierno de Nuevo León planea una inversión hasta de 25 mil millones de pesos mediante un plan maestro a corto, mediano y largo plazos, que concluiría en 2050, anunció el gobernador Samuel García Sepúlveda en una conferencia de prensa en la que estuvo acompañado por el director de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán Villarreal.
García Sepúlveda señaló que en la entidad hay un déficit de 3 mil litros por segundo de agua para satisfacer a toda la población, que necesita 16 mil litros por segundo.
Las acciones de la primera fase ya están en marcha. Las medidas emergentes a las que se refirió son la rehabilitación, incorporación y perforación de 132 pozos, reparación de fugas, bombas flotantes en la presa Cerro Prieto, declaratoria de emergencia, programa de atención con pipas y tanques cisterna, nuevos equipos de bombeo, instalación de 16 garzas y reductores en escuelas y edificios de gobierno, nueva tarifa para incentivar el ahorro y valor del agua, donación del sector agrícola y convenios con la iniciativa privada.
Además, se cambiarán 1.5 millones de medidores, se cobrará la cartera vencida y se conectará a quienes tienen tomas irregulares. “En agosto esto se arregla y no vuelve a pasar”, aseguró.
El gobernante recalcó que el compromiso es acabar en diciembre de 2023 la presa Libertad, que dotará a la entidad de 1.6 metros cúbicos por segundo, con una inversión final de 7 mil millones de pesos, y modulación de presiones mediante la reparación de fugas, lo que aumentará el caudal en 500 litros por segundo y requerirá una inversión de 850 millones de pesos.
La tercera fase, expuso, no le tocará iniciarla, pero dejará “encaminados” los trabajos. Se trata de la construcción de un segundo acueducto en El Cuchillo, traer agua de la presa tamaulipeca Vicente Guerrero, que tiene superávit, así como del río Pánuco, donde se tiene una concesión para extraer 15 metros cúbicos por segundo, y la edificación de una planta desaladora.