De manera paralela al Tren Maya, se trabaja en el “más importante proyecto de investigación” que se haya realizado en la región maya de México, esto como resultado del salvamento arqueológico de miles de piezas y sitios, informó Diego Prieto, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Gracias al trabajo de 293 especialistas en diferentes disciplinas –200 de ellos arqueólogos– se ha logrado hacer decenas de hallazos “extraordinarios, entre los que hay vasijas con escritura antigua, pinturas rupestres y templos en exteriores o en cuevas”. Uno que destacó es la canoa ancestral, localizada en las aguas de un cenote.
Prieto participó ayer en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, en la que se dieron algunos detalles de los avances del Tren Maya, entre ellos el rescate de vestigios arqueológicos que enriquecerán el entendimiento del mundo maya en la zona.
Aprovechó la oportunidad para felicitar a los destacados arqueólogos mexicanos Eduardo Matos Moctezuma y Leonardo López Luján, quienes acaban de ser admitidos como miembros honorarios internacionales a la Academia Americana de Artes y Ciencias. Ambos han hecho relevantes aportaciones en el estudio de las antiguas ciudades de Teotihuacan y Tenochtitlan, y por 44 años han conducido el Proyecto Templo Mayor.
Al retomar la información sobre las huellas prehispánicas en las zonas circundantes del Tren Maya, Prieto dijo que se ha intervenido más de 3 mil vestigios arqueológicos y analizado en laboratorio cerca de 500 mil tiestos de cerámica, algunas también restauradas; se han hallado 23 mil estructuras de diversos tamaños, de ellas, mil 292 bienes inmuebles y 129 enterramientos humanos, la mayoría con ofrendas; así como 835 elementos naturales asociados a contextos arqueológicos, fundamentalmente cuevas y cenotes.
El proyecto arqueológico, dijo, incluye además la construcción de dos museos, la mejora de los existentes y el arreglo de las unidades de servicio en las zonas arqueológicas, así como la construcción de centros de atención a visitantes, con servicios complementarios que puedan ser concesionados a las comunidades.
Apuntó que a los trabajos se han sumado más de mil empleados de las comunidades de los cinco estados por los que se proyecta pase el Tren Maya.