Internet permitió que un par de hermanos franceses que comienzan a crear música puedan ser escuchados al otro lado del océano. En el caso de Isaac y Nora, cuyo talento y experimentación los condujo a la música latinoamericana, el impacto, además de volverlos virales, los ha traído hasta México, una experiencia que toda su familia considera “un gran sueño”.
“Lo que empezó como una forma de juego en casa, tocando música entre nosotros tres, y subiéndola a Internet, nos permite construir proyectos aquí y poder tocar en salas tan bonitas como El Cantoral; es un privilegio enorme”, señaló Nicolas Restoin, padre y acompañante de Isaac y Nora.
Para el también guitarrista, toda la experiencia ha sido “un descubrimiento y un placer, una suerte. Es un poco extraño porque nuestro público está aquí, y al final nosotros estamos aquí por primera vez”, añadió Nicolas en español con un fuerte acento francés, mientras sus hijos lo miraban atentos.
Los jóvenes músicos llevan dos años estudiando español, “con una aplicación en el teléfono, y después hemos aprendido también mirando series con subtítulos, y ahora hablamos un poco”, contó Isaac, aunque también su hermana insiste en practicar la lengua en la que canta desde hace algunos años.
Descubren distintas formas de hablar el español
El éxito de Isaac y Nora ha sido tan rápido, que hasta hace no mucho nadie de su familia sabía que existían diferentes formas de hablar el español. “Ni siquiera sabíamos que hay tanta diferencia entre el de España y el de México o América Latina. El de la aplicación que usamos es el de Latinoamérica, para todo acerca de vouvoiement, ustedes-vosotros, hay diferencias. Al principio no entendíamos cómo funcionaba, pero es un poco como la música, lo importante es practicar”, indicó Restoin.
Es el primer viaje que la familia hace a Latinoamérica, aunque “teníamos el proyecto de cruzar por primera vez el mar hace dos años, al principio de la pandemia; habíamos pensado en Cuba, pero fue cancelado”, relatan.
También, gracias a Internet, los músicos tenían ya una idea de cómo sería la región. Por videos de YouTube se habían hecho de varias imágenes en la cabeza, como el concepto de la comida en las calles; “siempre teníamos hambre después de ver un video”.
Ya con unos días en el país, la familia también se ha formado sus propias conclusiones acerca de lo que habían escuchado o conocido. “Encontramos la vida muy agradable aquí y, por ejemplo, con un sentimiento de gran seguridad, porque en Francia se puede decir que es posible que México sea peligroso, por el momento –y hemos visitado muchos lugares, quizá sólo lugares seguros– tenemos un sentimiento de tranquilidad”, aseguró Restoin.
“Es un privilegio tocar aquí”
Isaac y Nora también se presentarán en Colombia, Perú y Chile. Optaron por comenzar por México “un poco para descubrir este país, porque es el lugar donde tenemos el gran público”, resaltó el joven trompetista. Su padre expresó: “Es realmente extraño para nosotros tener un público en un país que no conocemos. Lo estamos descubriendo, todo nos encanta. Es un privilegio tocar aquí”.
Actualmente la familia se encuentra en Oaxaca, uno de los lugares que más le interesaba conocer. “Nos queríamos venir un poco antes para tener tiempo para descubrir, disfrutar y de adaptarnos, no sólo por el jet lag, sino al clima, la altura, la comida. Al final creo que fue una buena idea venir un poco antes”, sostiene Nicolas.
Sin embargo, tener una creciente carrera musical no siempre es fácil. “Hacemos la escuela a distancia, con el Centro Nacional de Educación a la Distancia en Francia”, relató Isaac. Si bien esa posibilidad les ha permitido viajar para presentar su música en otros países, sus padres también son conscientes de las desventajas que implica educarse de esa manera.
“No es tan fácil porque toma mucho tiempo, y además creo que niños de la edad de Isaac y Nora tienen que convivir con otros pequeños. La escuela no son sólo las asignaturas y las evaluaciones, también es pasar tiempo con los amigos y es lo que falta un poco en nuestra manera de vivir en la actualidad”, admite Restoin.
Aun con una gira en puerta, el padre de Isaac y Nora no considera que él ni sus hijos sean músicos, sino lo que hacen ahora es cuestión de suerte: “Es raro que alumnos puedan dar conciertos, el camino clásico es aprender música y cuando eres un maestro tocar. Nosotros tenemos la suerte de poder dar conciertos mientras estamos aprendiendo. Es algo raro, no sabemos realmente por qué, tratamos de disfrutarlo”.
Por eso ahora su dinámica consiste en mejorar e interpretar canciones a la medida de sus capacidades. “Me gustaría algún día ver a Isaac y Nora empezar a crear su propia música, pero por el momento creo que es un poco temprano pensar en eso porque ya tenemos muchas cosas que aprender”, señala el guitarrista.