Cuernavaca, Mor. Denise N, de 18 años de edad, estudiante de la facultad de Derecho en la Universidad del Estado de Morelos, campus Chamilpa, denunció haber sido drogada y violada por un hombre llamado Antoni N, luego de que fuera a beber con sus compañeros a un bar en las cercanías de la escuela.
Reyna, la madre de la joven, narró a La Jornada que la estudiante salió de su casa el pasado jueves 28 de abril, en el poblado de Santa Catarina, municipio de Tepoztlán, para tomar clases en la universidad, sin embargo, en el camino se encontró con tres compañeros que la invitaron a comer en un bar cercano.
La madre de la víctima considera que le pusieron algo en la bebida, fue dopada y ya no fue a la escuela, ni llegó a su casa ese día. Ante la desaparición, la familia interpuso una alerta ante la Fiscalía General del Estado, que emitió una ficha para su localización.
Denise regresó a casa hasta el viernes, cerca de las 9 de la mañana. Su madre contó que llegó bajo los efectos aparentes de una droga pues apenas hilaba algunas palabras y decía no recordar casi nada.
Tras reportar que su hija ya había llegado a su casa, el personal de la FGE les solicitó a ambas que se presentaran a las oficinas de esta dependencia, ubicadas en la capital morelense, para que la estudiante confirmara que ella “se ausentó de manera voluntaria”.
Según narró la señora Reyna, cuando se metió a bañar la tarde del viernes, se pudo dar cuenta que tenía múltiples moretones en varias partes del cuerpo, entonces la volvió a llevar a las oficinas de la fiscalía para que la revisaran y le tomarán otra declaración.
Según las declaraciones de Denise, los compañeros se fueron en taxi luego de algunas horas en el bar, durante la noche del jueves. A ella la dejaron con el mencionado Antoni, y ambos se fueron rumbo a Tepoztlán, en un autobús.
Sin embargo, Antoni la obligó a descender en la Paloma de la Paz y entraron en un domicilio, y se dirigieron a uno de los cuartos.
Una vez en el interior, la joven pidió entrar al baño, y al salir e intentar irse, el hombre ya había cerrado con llave la entrada, incluso apagó su celular y las luces para que no intentara escapar. Al despertarse hasta el otro día, Antoni le dijo que se fuera a casa, porque la estaban buscando.
“Mi hija como pudo llegó a casa drogada. Después me di cuenta que estaba golpeada, por lo que me regresé otra vez a la FGE para que le tomaran otro testimonio y para levantar la denuncia por abuso sexual, porque la violaron”, dijo la señora Reyna.
Con esto, se espera que Antoni sea detenido. También pidió a los padres y jóvenes, a estar informados sobre a dónde van y con quién van estar, porque asegura que las 18 horas que estuvo sin saber de ella, “fue lo peor que nos puede pasar”.
La familia exigió a las autoridades y al ayuntamiento de Cuernavaca, a que revisen los locales de comida y venta de alcohol que hay en avenida Universidad, pues estos incluso les venden a menores de edad, y no descarta que hasta se comercialicen sustancias ilegales.