París. Marcadas por una inflación creciente, las demandas de mayor poder adquisitivo fueron el centro de las tradicionales manifestaciones del 1 de Mayo este domingo en todo el mundo, con incidentes en Francia y detenciones en Turquía.
La policía antimotines turca detuvo a numerosos manifestantes en Estambul en una marcha que según las autoridades no fue autorizada.
En París, las manifestaciones se volvieron violentas cuando jóvenes chocaron con la policía y edificios fueron vandalizados, aunque los sindicatos dijeron que más de 200 mil personas participaron en los actos en toda Francia y que en general fueron pacíficos.
Unas 50 personas fueron detenidas en las protestas en París.
El 1 de mayo es feriado en muchos países y en todos los continentes hubo eventos.
Las manifestaciones en Europa fueron las más polémicas, con personas congregadas en la Plaza Taksim de Estambul donde corearon "vivan el trabajo y la libertad, viva el 1 de mayo".
Autoridades de la ciudad dijeron que el grupo se negó a dispersarse y que 164 fueron detenidas, mientras que las marchas en otras partes de Turquía se efectuaron pacíficamente.
En algunas ciudades italianas, como Turín, se reportaron refriegas, mientras miles de personas se congregaron en Londres y ciudades alemanas sin señales de problemas.
En España, unas 10 mil personas se manifestaron en Madrid y otras ciudades en marchas muy concurridas.
La ministra española de Trabajo Yolanda Díaz, una comunista, dijo que quería solidarse con los trabajadores de Ucrania "que no pueden protestar".
América Latina
En Honduras la izquierdista Xiomara Castro, flamante presidenta, fue recibida por miles de personas que la vitorearon. Castro le respondió prometiéndoles gobernar para ellos y así poner fin a una "era oscura" de corrupción y narcotráfico.
En Buenos Aires, un acto organizado por la izquierda expresó su rechazo en Buenos Aires contra el reembolso de los préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras que en otra manifestación simpatizantes del gobierno argentino respaldaron la política del presidente Alberto Fernández.
También hubo dos marchas de distinto signo en Caracas, en una de las cuales los trabajadores de hospitales y otros empleados de servicios básicos reclamaron un "salario digno".
"Pueblo, escucha, únete a la lucha" y ¡Qué vivan los trabajadores!" fueron algunas de las consignas.
Entretanto, miles de simpatizantes del gobierno del presidente socialista Nicolás Maduro celebraron la "recuperación económica" de Venezuela.
Ante una multitud, Maduro aseguró que "Venezuela va a la prosperidad" luego de la "tempestad económica" provocada por sanciones financieras de Washington, que incluyen un embargo petrolero.
"Este segundo semestre del 2022 estaremos el doble de mejor económicamente, la recuperación apenas comienza", aseguró el mandatario.
En Chile también hubo dos marchas diferentes una de las cuales terminó en incidentes con la policía.
Miles salieron a las calles sólo unos días después de que el gobierno del presidente izquierdista Gabriel Boric aumentó en 12,5% el salario mínimo, que alcanzará los 400 milpesos (470 dólares) mensuales a partir de agosto. El objetivo del mandatario es que llegue a 500 mil pesos en 2026.
"Tiremos de la oreja"
El clima fue más hostil en Sri Lanka, donde la oposición mostró una rara unidad al pedir la dimisión del presidente Gotabaya Rajapaksa por la peor crisis económica de la historia del país.
"Es hora de que le tiremos de la oreja y lo echemos", dijo el exlegislador Hirunika Premachandra en un mitin en Colombo.
El presidente sudafricano Cyril Ramaphosa también sintió en carne propia la desaprobación. Debió abandonar un acto cuando mineros irrumpieron en el escenario en el que debía hablar y corearon "Cyril debe irse".