Ciudad de México. Un grupo de enfermeras y enfermeros de diversas entidades de la República realizaban esta tarde una marcha del Hospital Juárez de México al Zócalo capitalino para exigir salarios dignos y mejores condiciones laborales para su gremio, el cual enfrenta condiciones de gran “precariedad”.
Poco después de las 14 horas, los profesionales de la salud iniciaron una caminata en la cual destacaron que “no son mártires, ni héroes, ni viven solo de reconocimiento”, sino que necesitan un salario acorde con la importancia de su labor,así como la posibilidad de ascender profesionalmente en la medida en que se capaciten y hagan cursos de actualización.
Paula Martínez Garduño, dirigente de la Unión Nacional de Enfermería Mexicana, explicó en entrevista que muchas de las y los enfermeros realizan jornadas exhaustivas de doce horas o más – que se intensificaron aún más durante la pandemia de covid–, por sueldos “muy insuficientes” debido a que los integrantes de dicho gremio suelen ser registrados en la nómina con las categorías más bajas del escalafón (entre ellas la de auxiliar de enfermería) sin importar que cuenten con nivel licenciatura e incluso con posgrados y especializaciones.
La especialista resaltó que la falta de condiciones laborales dignas de sus colegas es uno de los elementos que inciden en que las enfermeras no pueden dar un servicio adecuado y de calidad a los pacientes, por lo que estos son también una población afectada por este escenario.
Durante la marcha, los inconformes subrayaron que entre los aspectos centrales de su pliego petitorio se encuentra el incrementar el presupuesto del sector salud al 6 por ciento del Producto Interno Bruto; actualizar los catálogos sectoriales o profesiogramas para enfermería dentro del sector público y privado; aplicar de forma obligatoria la NOM-019-SSA3-2013 por parte de todas las instituciones del sector salud y universalizar la profesionalización de la enfermería en México con un salario “justo y honorable”.
De igual manera demandaron elevar la beca del pasante en enfermería de manera “sustancial” pues muchos de ellos realizan incluso más labores que las propias enfermeras y enfermeros de base por un apoyo económico que no rebasa los 800 pesos catorcenales.
La marcha avanzaba hacia el Zócalo capitalino en medio de consignas como “De aplausos no se come”, “¡Salario digno!”.