Ciudad de México. Pasando el 10 de abril, día de la consulta de revocación de mandato, el presidente Andrés Manuel López Obrador enviará a la Cámara de Diputados una iniciativa de reforma constitucional en materia electoral, entre algunos de sus objetivos está renovar la integración del consejo general del INE y del TEPJF. “Que ya no haya jueces con actitudes tendenciosas en lo electoral.”
Antes, el Ejecutivo adelantó en Palacio Nacional que en su propuesta los tres poderes presentarán a ciudadanos, independientes, de inobjetable honestidad; cada poder propondrá a 20 ciudadanos, 60 para el caso de consejeros y algo parecido en el caso de magistrados, y ocurriría en votación abierta.
El mandatario recibió a Enrique Alfaro y a Samuel García. El gobernador de Jalisco informó que el tabasqueño acordó financiar con 10 mil millones de pesos, de recursos públicos, el nuevo sistema de agua para la zona metropolitana de Guadalajara y la línea cuatro del tren metropolitano que comunicará la capital del estado con el municipio de Tlajomulco, donde Alfaro gobernó. Después el gobernador de Nuevo León, Samuel García, salió de otra reunión privada con el mandatario donde abordó los temas de agua y el tren suburbano para Monterrey, pero al contrario del primero, no mencionó nada específico, ni cifras.
De esa forma, antes de enterarse que ya se había aprobado la anulación del decreto de promoción de la consulta de revocación, advirtió: “¡cómo un tribunal electoral va a estar en contra de que se difunda una consulta, un plebiscito, un referendo? Es una paradoja, es contradictorio, es un absurdo, además de ser antidemocrático”.
Y en el Salón Tesorería los reporteros le confirmaron lo que había sucedido en la noche en el seno del tribunal electoral. El Presidente reaccionó ante esa noticia, y fue tajante en su reacción: “pasando el 10 de abril vamos a enviar una iniciativa de reforma a la Constitución para garantizar la democracia en México, que ya no haya jueces con actitudes tendenciosas en lo electoral; esto es, que no haya consejeros, que no haya magistrados que no tengan vocación democrática. Y también que se garantice el voto libre, secreto, que no haya fraudes electorales”.
–¿Al Senado o la cámara?
–A la Cámara de Diputados va primero. Y les adelanto, voy a proponer que sea el pueblo el que elija a los consejeros electorales y a los magistrados de manera directa.
–¿Por voto?
–Con voto abierto. El pueblo va a elegir. De forma directa. Se acabó –o espero que se acabe– lo de los acuerdos cupulares contrarios al interés del pueblo. Los tres poderes van a presentar a ciudadanos, verdaderamente independientes, de inobjetable honestidad, buscando que sean mitad mujeres, mitad hombres.