Madrid. Un motor de cohete de propulsión térmica nuclear, que usa lo que se denomina borboteo de combustible líquido centrífugo, se suma a las opciones para viajar a más velocidad por el espacio profundo.
Bajo un contrato de investigación para la Oficina del Proyecto de Propulsión Nuclear Espacial en el Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA, la Universidad de Alabama en Huntsville (UAH) está liderando una colaboración de casas de estudios superiores estadunidenses para investigar el concepto propulsión térmica nuclear (NTP, por sus siglas en inglés).
La NASA ha realizado avances sustanciales hacia el diseño NTP de combustible sólido. El concepto de borboteo a estudio es una de las tres propuestas basadas en hidrógeno para un cohete de combustible líquido de próxima generación.
Las ventajas del diseño incluyen un rendimiento significativamente mayor que los motores de cohetes de combustible líquido convencionales que queman hidrógeno y oxígeno, afirmó en un comunicado el Dale Thomas, investigador principal del proyecto y académico en la UAH.