Puebla, Pue., Veintitrés órdenes de aprehensión por el caso del bebé Tadeo, cuyo cuerpo fue encontrado en un bote de basura en el penal de San Miguel, en la capital de Puebla, se han cumplido a fin “de aplicar todo el peso de la ley”, informó el gobernador morenista Miguel Barbosa Huerta, quien advirtió que no se dejará presionar por grupos delictivos.
La tarde de ayer se inició una audiencia del proceso penal contra los detenidos, y se esperaba que concluyera durante la madrugada de este miércoles.
En su conferencia de prensa, el mandatario sostuvo que en Puebla no hay impunidad y se aplicará la ley en este caso.
Barbosa Huerta manifestó que su gobierno no está vinculado con la delincuencia, como en el pasado, y que responde con firmeza para combatir la inseguridad y regresar la paz a las familias poblanas.
En videoconferencia de prensa en Casa Aguayo, destacó que toma decisiones para mejorar el funcionamiento de las dependencias del gobierno estatal, entre ellas la Secretaría de Seguridad Pública, a cuyo titular remplazó el pasado lunes.
El hallazgo del cadáver del bebé se reportó el 10 de enero cuando un interno del penal lo encontró en un contenedor de residuos en donde buscaba material reciclable.
Entre los arrestados se encuentra el encargado de despacho del penal de San Miguel, Jaime Mendoza Bon, y 18 custodios.
Los servidores públicos están acusados de abuso de autoridad o incumplimiento de un deber, infracciones a las leyes y reglamentos sobre inhumaciones y exhumaciones, así como encubrimiento.
Activistas y defensores de derechos humanos denunciaron el caso y el pasado fin semana se supo que el cuerpo del menor, de tres meses de edad, había sido robado del panteón de San Nicolás Tolentino, de la alcaldía de Iztapalapa, Ciudad de México.