De acuerdo con datos de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), la capital del país es la quinta entidad de la República Mexicana con mayor número de alumnos que abandonaron sus estudios en todos los niveles educativos, en escuelas particulares y públicas, al sumar 93 mil 418 educandos, mientras 10 mil 984 docentes perdieron su empleo y 670 escuelas particulares cerraron sus puertas a causa de la epidemia de covid-19 en los ciclos escolares 2018-2019, 2019-2020 y 2020-2021.
Así lo dio a conocer la presidenta de la Comisión de Educación del organismo empresarial, Patricia Ganem Alarcón, quien al preguntarle sobre las medidas que adoptaron las escuelas particulares para evitar su cierre en la pandemia, explicó que entre las acciones que emprendieron algunos de estos centros educativos fue aumentar de 10 a 30 por ciento el número de becas, bajar los precios de la colegiatura, eficientar el uso de la tecnología y, en algunos casos, pagar el servicio de conectividad.
La educación a distancia evidenció también otras pérdidas, como la relación entre los niños y las de éstos con sus profesores.
En conferencia de prensa virtual, destacó que a raíz de la pandemia se comenzó a valorar la parte emocional y se enfatizó la importancia de la socialización en la educación.
Señaló que “la pobreza de aprendizajes ya se observa. Los alumnos de primaria y secundaria han manifestado graves problemas de comprensión lectora y de bajas capacidades de razonamiento lógico, así como dificultades para profundizar mediante la investigación y la búsqueda de información en los medios electrónicos”.
De acuerdo con una estadística que presentó Ganem Alarcón, la proporción de niños que viven en situación de pobreza de aprendizaje en México era de 53 por ciento antes de la pandemia y podría alcanzar hasta 70 por ciento ante el cierre prolongado de las escuelas y la carencia educativa que aún tiene el aprendizaje a distancia.
En tanto, el modelo a distancia o híbrido recae en los profesores, sin que estos cuenten con equipamiento y conectividad adecuada para el trabajo, tanto en el contacto como en el formato pedagógico, apuntó.