Cajeme, Son. Los gobernadores tradicionales de la nación yaqui recientemente electos informaron que sometieron a un interrogatorio público a dos integrantes de las etnias huiviris y Pótam para que explicaran los motivos por los cuales impugnaron el decreto de creación del distrito de riego 18, lo que dio lugar a un amparo judicial a favor de los inconformes.
El juicio se efectuó en la ramada tradicional, de acuerdo a los usos y costumbres de los yaquis, lo que derivó en un rumor que fue compartido en redes sociales, según el cual los dos indígenas habrían sido secuestrados y estaban amarrados.
En septiembre de 2021 el distrito de riego 18 fue transferido al pueblo yaqui para su administración y uso como parte de las acciones del gobierno federal en el plan de justicia para la etnia. En Vícam Pueblo y Pótam, las dos cabeceras tradicionales del pueblo yaqui, se realizó un proceso de consulta sobre si se aceptaba o rechazaba el decreto.
Según los usos y costumbres de la etnia yaqui, los guardias tradicionales están facultados para portar armas y llevar a los señalados a la ramada tradicional a la espera del juicio indígena. Dado que no existen prisiones, regularmente los detenidos son amarrados a un tronco para evitar su fuga.
“Las normas internas indígenas son muy diferentes y esos juicios están perfectamente establecidos y reconocidos por las leyes mexicanas y las del estado de Sonora. Incluso, los tratados internacionales así lo establecen”, explicó Francisco Buitimea, de pueblo de Potam.
En entrevista para La Jornada, miembros de la tribu detallaron que se trató de un asunto interno entre dos grupos indígenas, los cuales fueron presentados ante la ramada tradicional para que explicaran los motivos del rechazo al decreto.
María Dolores Del Río Sánchez, secretaría de Seguridad Pública en Sonora, dijo que se trató de un asunto interno de la etnia. Invitó a todas los habitantes de las comunidades yaquis a que cualquier incidente lo reporten al número de emergencias 911.
La fiscal Claudia Indira Contreras Córdova notificó que personal ministerial de la Fiscalía en Sonora atendió el reporte de un presunto secuestro y agresión en el pueblo de Potam y explicó: “En cuanto a lo del secretario de Huiviris que había sido (supuestamente) levantado, que había sido lesionado, inmediatamente envié elementos a Potam para cerciorarse de la situación y no era así, la persona no estaba lesionada, había una sesión interna entre varios gobernadores recientemente electos y en esos momentos se establecía una reunión. Yo he estado en constante comunicación con los secretarios de los ocho pueblos, y no era cierta la información que se había distribuido”, explicó.
Las autoridades tradicionales aseguraron que ya se agotaron las consultas realizadas en la etnia y el resultado fue la aceptación del distrito de riego 18.