Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la posible participación de las fuerzas armadas para garantizar la distribución de medicamentos y terminar con el desabasto en las instituciones de salud. Es un compromiso y así se hará si es necesario, señaló durante su participación en la 112 Asamblea General del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Reconoció que en este tema “hemos batallado mucho” porque éste era un jugoso negocio de 10 empresas privadas, las que, además de tener garantizada la venta de medicamentos, no pagaban impuestos o tenían devoluciones de los mismos.

Ante representantes de los sectores obrero y patronal que integran el Consejo Técnico y la asamblea del instituto, comentó sobre el aumento del salario mínimo respecto del cual se lograron acuerdos entre esos sectores y el gobierno. No fue así en 2020, cuando no hubo consenso con los empresarios.

“Los respetamos en sus posturas, así es la democracia. Sólo en dictaduras hay posturas y pensamiento único”, pero confió en que “este año sí nos pongamos de acuerdo para aumentar el salario mínimo”, dijo.

Desde el inicio y al final de su discurso, el tabasqueño felicitó a Zoé Robledo, director del IMSS, de quien dijo que es un muy buen funcionario. El organismo, dijo, “está en muy buenas manos”.

Reiteró su agradecimiento a los trabajadores del Seguro Social por las labores desempeñadas durante la pandemia de Covid-19, pues lo hicieron aunque arriesgaron sus vidas, sobre todo al inicio de la emergencia, cuando no hubo la protección necesaria “porque no teníamos equipos suficientes para protegerlos. Por eso sí aplica decir que actuaron como héroes y heroínas”.

El mandatario reiteró su compromiso de garantizar a todas las personas, la atención médica y medicamentos gratuitos. Con la finalidad de cumplir, también insistió en que el modelo del programa IMSS-Bienestar que opera en las zonas rurales del país, se va a fortalecer y ampliar.

Dijo que para ello se trabajará de acuerdo con los gobernadores de los estados, pues se trata de atender a la mitad de la población que no tiene acceso a la seguridad social. El objetivo, afirmó, es hacer realidad el artículo cuarto constitucional, respecto a asegurar el derecho a la salud y esto “no tiene que ver con posturas políticas o ideológicas”. La salud es un derecho no un privilegio, sostuvo.