Tras el desbordamiento de la presa San Aparicio la noche del jueves, en la comunidad Monte Grande del municipio Genaro Codina, Zacatecas, más de 8 mil personas de las localidades, Santa Inés, Paso de Méndez y la cabecera municipal, sufrieron pérdidas severas.
El aumentó considerable del caudal del arroyo Perú destruyó dos puentes viales y cinco peatonales, dos casas e inundó viviendas y comercios; además se perdieron huertas de árboles frutales, ganado y hasta mascotas, incluso en algunas poblaciones el agua superó los ocho metros de altura, informaron autoridades.
A 35 kilómetros al suroeste de la capital de Zacatecas, el embalse San Aparicio, ubicado entre San Fernando y Perales, no pudo contener la corriente, reventó y provocó una pared de agua que ocasionó severos daños.
Se pierden cultivos frutales
La inundación afectó principalmente la cabecera municipal de Genaro Codina, donde resultaron dañadas decenas de viviendas, comercios y talleres; además se produjo la pérdida total de los árboles en las huertas de manzana y membrillo, así como un número aún indeterminado de ganado y mascotas.
En algunos puntos de esas poblaciones, el nivel del agua superó los ocho metros de altura. Aunque no se produjeron muertes ni personas lesionadas, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) mantiene un llamado de “alerta total”, en toda la región suroeste de la capital de Zacatecas. En Santa Inés, el afluente arrasó con el puente vial que cruza el lugar, y con parte de la carretera.
En Paso de Méndez dañó severamente el puente vehicular que lleva a la primaria del lugar y destruyó dos viviendas, de las que únicamente quedaron los pisos y cimientos.
Mientras tanto en la cabecera municipal, el caudal arrasó con los cinco puentes, tres de ellos viales, dos cruces peatonales que pasan sobre el río Perú, resultaron seriamente dañados. Asimismo decenas de árboles de todos tamaños, postes de luz eléctrica y telefonía, fueron arrastrados.
Además, debido a la ubicación de la presa Aparicio que colinda con Aguascalientes, Héctor Reyes Hernández, titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil de ese estado, informó que vigilan el cauce del río San Pedro, luego de que el afluente se incrementó de manera considerable tras la crecida.
También por las tormentas que se han registrado en los últimos días, en Colima, una mujer murió y otra fue rescatada, tras el derrumbe en la carretera Colima-Minatitlán en la madrugada de este viernes.
Hidalgo: deslave de cerro
En Hidalgo, los albañiles Florentino Espinoza Ávila y Alejandro Hernández Martínez de 24 y 21 años, respectivamente, que construían un muro de contención para una escuela, fallecieron al ser sepultados por cientos de toneladas de rocas y tierra, por el deslave de un cerro, que se reblandeció en el municipio de Tlanchinol.
En Jalisco, el gobierno federal amplió de 7 a 20 municipios la declaratoria de emergencia por los estragos que causó el huracán Nora en agosto y la Secretaría de Bienestar informó que ayer arrancó en Sinaloa el censo de afectados por este meteoro.
Por su parte, la Conagua señaló que en los próximos tres días canales de baja presión y las ondas tropicales número 31 y 32 ocasionarán lluvias de intensas a fuertes, en al menos 19 estados del país.
Cada damnificado del Chiquihuite tendrá apoyos
El gobierno del estado de México y la alcaldía de Tlalnepantla iniciaron el censo para determinar las acciones de apoyo para cada persona afectada por el desprendimiento del cerro el Chiquihuite, que dejó dos personas muertas, dos desaparecidas y 141 casas que deberán ser desalojadas.
La administración mexiquense informó que se instaló un centro de atención para las personas afectadas, se recopilará información, para determinar las acciones de apoyo de acuerdo con las condiciones de cada uno. En las mesas participarán dependencias locales y estatales.
(Alfredo Valadez, Silvia Chávez, Claudio Bañuelos, Juan Carlos Flores, Ricardo Montoya y Juan Carlos G. Partida)