La ausencia de grupos de apoyo alrededor del Congreso capitalino durante el Informe de Claudia Sheinbaum no fue obstáculo para que con sólo los legisladores e invitados se viviera un ambiente festivo en el que la cordialidad demostrada con saludos de abrazo y beso rompieron con las recomendaciones de sana distancia que dispuso la mesa directiva para prevenir contagios.
Además de la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, quien acudió en representación del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, acompañaron a la titular del Ejecutivo local cinco titulares de secretarías de Estado, entre ellos Tatiana Clouthier, de Economía; Jorge Arganis, de Comunicaciones y Transportes, y Alejandra Frausto, de Cultura.
También acudieron la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, y el de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez; las gobernadoras electas de Tlaxcala, Colima, Guerrero y Baja California Sur, así como los mandatarios de Morelos y estado de México, además del rector de la UNAM, Enrique Graue, empresarios y personalidades de la cultura.
Las escalinatas externas del recinto, el vestíbulo y el pasillo central del salón de plenos fueron lugares de rencuentro que se sellaron con poses para las selfis y las cámaras de fotógrafos institucionales y de prensa. Entre las personas más solicitadas estuvo Rosa Icela Rodríguez, que igual recibió afectivos saludos de morenistas y opositores.
Tras el incidente protagonizado por alcaldes de oposición hace unas semanas, en la última sesión de la pasada Legislatura, esta vez tuvieron acceso libre al pleno, aunque ocuparon un lugar detrás de los escaños de Morena, sus aliados y las corraletas con sus invitados.
Antes de las 10 de la mañana, las escalinatas y el vestíbulo quedaron vacíos. La sesión se prolongó por tres horas, sin incidentes, salvo el desvanecimiento de una diputada atribuido a su estado de gravidez, que no pasó a más después de ser atendida en una ambulancia.
En los callejones Del 57 y Guillermo Marconi, así como en Xicoténcatl, se ubicaron decenas de uniformados para vigilar.
En la calle Donceles se colocaron dos juegos de bocinas gigantes frente al Teatro Fru Fru y en las instalaciones del edificio alterno a la vieja casona del Senado, una pantalla gigante dio cuenta de la presentación en el Legislativo.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana desplegó 418 efectivos policiacos en las inmediaciones del Congreso capitalino que estuvieron apoyados con 25 vehículos, 11 motocicletas, dos ambulancias y con vallas metálicas se confinaron varias calles cercanas al recinto: de República de Cuba a Tacuba, esquina Allende, y el tramo de Eje Central a República de Chile con Donceles.
De acuerdo con el reporte de la policía, no hubo novedades ni incidentes y tampoco se reportaron protestas.